Alerta en Comodoro Rivadavia: un peligroso bull terrier anda suelto y ya atacó a varios perros

El último domingo, el barrio Pueyrredón de Comodoro Rivadavia se vio conmocionado por un incidente alarmante. Cerca de las cuatro de la tarde, se escucharon los gritos desesperados de una mujer que paseaba con su familia en la intersección de las calles Dr. Cayelli y Colonos Galeses, cuando su perro fue brutalmente atacado por un bull terrier que "agarró a la mascota del cuello y no la soltaba".

“Pasaron varios vecinos, y un señor que iba en auto paró, se bajó y tuvo que ahorcar al perro y ahí logró que soltara al otro animal”, relató una vecina que presenció la inquietante escena y luego colaboró para retener al animal, que se escapó de madrugada.

Ahora, publican advertencias en las redes y tratan de difundir el caso para que quien vea al animal pueda retenerlo hasta que logren ubicar al dueño, para prevenir nuevos ataques.

La mujer dijo que ya cuando apareció el conductor que finalmente pudo liberar al perro que fue víctima del ataque, “la familia ya se había resignado”, porque parecía que no había nada qué hacer.

Incluso, contó que antes de eso una chica había querido ayudar y el perro la mordió.

Una vez que se superó el peor momento, los vecinos que se acumularon en la esquina lograron retener al bull terrier y contactaron a la policía, mientras que la dueña del perro atacado lo llevaba con urgencia a una veterinaria.

La respuesta que recibieron los vecinos por parte de la policía no les dejó mucho margen de acción. "Nos dijo que no podían hacer nada, que correspondía a la Municipalidad o a la Dirección de Veterinaria. Y nos sugirieron que atáramos al perro en un patio de una casa deshabitada", precisó la vecina.

Gotas sedantes y un segundo ataque

Además, mientras otras personas que salieron a asistir a la familia controlaban al perro, la señora fue hasta otra veterinaria a comprar gotas para sedar al violento animal. Allí, se enteró que lo que había pasado en la esquina de su casa no era un caso aislado.

"Compré unas gotas para sedarlo en una veterinaria que estaba abierta, y ahí mismo me contaron que haíca un rato habían recibido a otro perro mordido por un bull terrier”, explicó la mujer.

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Cuando una vecina fue a comprar gotas sedantes a una veterinaria, se encontró con otro perro que había sido mordido por el mismo bull terrier.

Ante esta información, le mostraron la foto a la dueña de la otra mascota atacada una foto del bull terrier que tenían detenido y confirmó que era el mismo que había mordido a su perro en Av. Roca y Kennedy.

La vecina que compró las gotas se hizo responsable de cumplir con el consejo que había dado la policía, hasta tanto tuvieran respuesta de la Municipalidad.

“Tuve que recibir ayuda de los vecinos, porque sola iba a ser imposible”, explicó. Y contó que en plena madrugada de este lunes, se tuvo que levantar a darle más gotas, porque estaba aullando y llorando e iba a despertar a todo el barrio.

Sin embargo, el sedante no fue suficiente. Según advirtió otra vecina que vive cerca, cerca de las cuatro de la mañana el perro ya no estaba más. Vio que se había soltado de la correa, saltó una reja y escapó.

Suelto en Comodoro Rivadavia

Ahora, la preocupación pasa porque el bull terrier sigue suelto en la zona y podría repetir sus ataques en Comodoro Rivadavia.

Además, en las redes sociales detectaron un antecedente que involucraría al mismo animal.

"Hemos encontrado en Facebook que ya atacó a otros perros y que hace dos semanas, su dueño lo había perdido y lo encontró, pero se escapó nuevamente.

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El aviso de advertencia que los vecinos de Comodoro Rivadavia difunden este lunes por las redes.

“No sabemos quién es la persona responsable y desde ‘Comodoro atiende’ nos piden una denuncia policial y el nombre y dirección del dueño, pero como no lo tenemos, no van a hacer nada", reclamó la vecina.

El bull terrier, con una de las mordidas más fuertes

El bull terrier es una raza de perro conocida especialmente porque se la considera potencialmente peligroso. De aspecto imponente y mucha fuerza física, tiene incluso un aspecto que -sumado a su reputación- lo hacen temible para el común de las personas.

Sin embargo, como suele suceder con ésta y otras razas como el rottweiler o el dogo, este perro no es agresivo por naturaleza. Antiguamente se lo usaba como perro de pelea y de caza, y especialmente para eliminar ratas, pero sus cultores aseguran que es una buena mascota, que combina su gran energía con un caracter cariñoso y amable.

Físicamente, el bull terrier es un perro fuerte y musculoso, con una cabeza alargada y triangular, y ojos pequeños. Pesa entre los 20 y 40 kilos, y su fuerza de mordida es una de las más potentes, alcanzando los 320 PSI (sigla en inglés de Libras por Pulgada Cuadrada, una unidad de medida de presión).

Probablemente esa característica es lo que hoy sigue haciendo peligrosos a los perros de este tipo cuando no se los educa y tiene con responsabilidad.