El frío se siente fuerte en casi todo el país y genera problemas en los vehículos. Qué hacer para que el motor de tu auto no sufra las inclemencias del tiempo.
Hace tiempo que el frío de este invierno se hace sentir no solo en Neuquén y la Patagonia, sino también en buena parte del país. Las bajas temperaturas se sufren hasta en la costa Atlántica bonaerense, y la ola de frío nos obliga a protegernos y también al cuidado de los vehículos, en especial al motor del auto.
Los dueños de vehículos que no cuentan con un lugar cerrado para guardarlos, particularmente por las noches, cuando la temperatura está por debajo de los 0 grados, son los que deben prestar mayor atención al cuidado del auto, y de su motor.
El primer encendido del día del vehículo es clave para los que duermen a la intemperie y no tienen un reparo que los contenga ante las bajas temperaturas. Por eso es esencial tomar precauciones para mantener el rendimiento óptimo del vehículo y no sufrir las gélidas mañanas y las crudas noches de invierno.
Los cuidados del motor del auto para hacerle frente al frío
Los mecánicos advierten que uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta es asegurarse de que la batería del auto esté en perfectas condiciones. Esto se debe a que cuando hay bajas temperaturas la batería se exige más y hace que pierda potencia. Si la batería no está en buenas condiciones, en algún momento el vehículo queda sin arranque.
Otro impacto que los vehículos empiezan a sufrir durante los momentos más fríos del invierno son los problemas con el refrigerante del motor, que necesita ser revisado de manera periódica para evitar inconvenientes.
Los consejos de los mecánicos son que al refrigerante del motor se le haga un chequeo cuando se le hace el service: medirle el pH para saber la tolerancia a las bajas temperaturas que tiene el refrigerante que posea el vehículo. Los refrigerantes modernos ayudan a mantener la temperatura del motor de manera efectiva.
Qué cuidados tener con los vehículos diésel por las bajas temperaturas
Los vehículos diésel equipados con bujías de precalentamiento suelen tener dificultades de arranque ante las bajas temperaturas. Si bien durante el verano, sin los efectos del frío, un auto con motor de 4 cilindros y con dos o tres bujías quemadas puede haber funcionado sin problemas, si cuando llega el frío no andan las cuatro bujías el coche no arranca.
En cuanto al mantenimiento de los líquidos refrigerantes, las recomendaciones varían según el kilometraje y el tipo de vehículo con el que se cuenta. En algunos casos, el cambio del refrigerante es obligatorio según la garantía del fabricante, pero en otros vehículos más antiguos es suficiente con controlar el nivel y la capacidad del refrigerante para asegurar un funcionamiento óptimo del motor.
Sobre el impacto del frío en la batería, los mecánicos sugieren consultar con expertos en acumuladores para realizar pruebas regulares que evalúen la potencia de arranque del auto y aseguren un rendimiento estable durante las épocas de bajas temperaturas como la que está atravesando buena parte de Argentina.
Cómo proteger el exterior de un auto ante el frío extremo
- Es recomendable guardar el auto en un garaje o bajo techo y, si no se utiliza con frecuencia, cubrirlo con una manta para protegerlo de las bajas temperaturas, que pueden dañar tanto la batería como la carrocería y la pintura.
- Las escobillas del limpiaparabrisas deben estar en buen estado para garantizar una visibilidad óptima en invierno, con lluvias y nieve. Si las escobillas no limpian adecuadamente, se recomienda limpiarlas con un trapo humedecido en alcohol.
- Aplicar una capa de cera en el auto (una vez al mes) protege la pintura de la humedad y la corrosión causada por el asfalto húmedo durante los meses de bajas temperaturas.
- Mantener los frenos limpios y bien regulados es crucial en invierno, cuando se requiere una mayor distancia de frenado debido a las condiciones de la carretera mojada y resbaladiza.
- Nunca conducir con los cristales del auto parcialmente limpios de hielo, ya que afecta la visibilidad. Evitar echar agua caliente sobre los cristales congelados para prevenir daños.
- Verificar el estado de los neumáticos con regularidad es crucial, especialmente en invierno cuando el pavimento húmedo aumenta el riesgo de deslizamientos debido a la menor adherencia de los neumáticos.
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