Las víctimas de 19 años fueron interceptadas por los delincuentes en la puerta de su domicilio. Les robaron más de 5 mil dólares y alhajas. Ocurrió en Castelar.
Tres delincuentes asaltaron a dos hermanos mellizos de 19 años, hijos de un médico legista y de una abogada, quienes fueron interceptados cuando estaban en la puerta de su casa en la localidad de Castelar, en el partido de Morón, junto a dos trabajadores que arreglaban el portón de entrada. Les robaron dinero y alhajas con los que escaparon tras dejarlos encerrados en el vestidor.
El robo ocurrió este jueves a las 11:30 en una casa ubicada en Machado 3510 de Castelar sur cuando dos estudiantes de Derecho, quienes son hermanos mellizos, junto a dos trabajadores de confianza de la familia, arreglaban el portón corredizo de la vivienda y fueron sorprendidos por ladrones que bajaron de una camioneta y estacionaron a unos 50 metros, según informó la agencia de noticias Télam.
El violento robo quedó registrado por las cámaras de seguridad instaladas dentro de la propiedad de la familia. Los delincuentes amenazaron a las cuatro víctimas para que entraran a la casa, donde los redujeron junto a otra hermana de los mellizos.
De acuerdo al testimonio de las víctimas, un delincuente le decía a uno de los mellizos “dame los dólares que tienen tus viejos”, mientras lo golpeaba, lo llevaba a empujones y con un arma le apuntaba en la cabeza hasta la caja fuerte que la familia posee en la habitación matrimonial.
“Nosotros tenemos como protocolo de cuidado dejar la caja fuerte abierta y con algunos dólares por las dudas si pasa esto, y bueno, nos pasó a nosotros lo que vemos a diario en todos lados”, dijo Pablo Ianniccillo, padre de las víctimas.
El médico agregó que “los ladrones estaban con pistolas calibre 9 milímetros y tenían barbijos que le cubrían el rostro. Todos eran violentos, hasta los hicieron tirar al piso boca abajo. Los golpearon a todos en la cabeza y se llevaron en cinco minutos lo que había en la casa”.
Fuentes de la investigación informaron que los delincuentes se hicieron un botín de 5.500 dólares, 50.000 pesos, tres teléfonos celulares y algunas alhajas. “Una vez cometido el robo, dejaron a todos encerrados en uno de los vestidores y se fueron en la camioneta en la que habían llegado. Uno de mis hijos me llamó con la computadora y a los gritos me dijo 'vení papá que nos robaron', y mi mujer, que estaba conmigo, llamó al 911. En el camino ya teníamos a cuatro patrulleros detrás de nosotros. Por suerte ellos están bien”, relató el hombre.
La investigación está a cargo del fiscal Javier María Ghessi, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°1 de Morón que caratuló el caso como “robo agravado” y dispuso diversas medidas con el fin de atrapar a los asaltantes. En el lugar del hecho trabajó personal de la Policía Científica y de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de Morón, que buscaron evidencias y les tomaron testimonio a las víctimas.
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