Rawson: se cierra el cerco sobre los boqueteros que fueron a robar una joyería y rompieron la pared equivocada

A exactamente un mes de que un grupo de boqueteros diera un insólito y frustrado golpe en una joyería de Rawson, la policía de Chubut realizó el último viernes una serie de cinco allanamientos que, según se informó oficialmente, cerraron el círculo sobre cinco sospechosos y arrojaron pruebas que los incriminan sin mayor lugar a dudas.

Como resultado de los procedimientos realizados en la misma capital chubutense y en Trelew, la División de Investigaciones encontró dos vehículos que, según estaría probado, fueron los utilizados en el intento de robo.

Se trata de un Peugeot 408 gris y un Volkswagen Polo, que de este modo se convierten en una de las pruebas contundentes contra los sospechosos allanados. Pero no las únicas.

Además, secuestraron la ropa utilizada por los sospechosos el día que realizaron un boquete en la pared del comercio, según pudieron establecer los investigadores. También incautaron teléfonos celulares y dinero en efectivo que estaba en poder de los investigados.

Cuatro operativos fueron en los barrios Planta de Gas, Tiro Federal y Constitución de Trelew, a los que se les sumó otro en el barrio Covira II de Rawson.

De este modo, permitieron cerrar el cerco sobre una banda que aquella madrugada se fue del comercio en una esquina céntrica de Rawson con las manos vacías.

El golpe frustrado en Rawson

El golpe boquetero, efectivamente, resultó un rotundo fracaso, por un error de calculos, entre otros contratiempos.

En primer lugar, los cinco encapuchados que intentaron meterse a una joyería para llevarse un valioso botín calcularon mal el lugar en el que hicieron el boquete.

En segundo, un vecino los vio y luego de que terminaron el agujero y comprobaron su error, temiendo quedar expuestos ante la policía, debieron huir dejando sus herramientas atrás.

Es decir: no sólo se fueron sin nada. Terminaron con menos cosas de las que habían llevado para cometer el delito.

Según informaron en aquel momento fuentes policiales a Canal 12, el intento de robo ocurrió aproximadamente a la 1:30 de la madrugada del 29 de octubre, un mes antes de los procedimientos del viernes último.

En ese momento, cinco encapuchados intentaron ingresar a la joyería ubicada en la esquina de Gregorio Mayo y Avenida San Martín.

Insólito fracaso de boqueteros en Rawson.

La joyería de Gregorio Mayo y avenida San Martín, que los boqueteros intentaron robar de madrugada en Rawson.

Con pericia lograron desactivar la alarma, que pese a los movimientros de los intrusos no se activaron. Pero luego de ese acierto, todo fue un despropósito.

El primer traspié lo sufrieron al romper una pared que no daba acceso al interior local, donde se encontraba el preciado botín que fueron a buscar, sino a un patio lateral.

En el interín, un testigo alertó a las autoridades que había visto a los intrusos saltando un paredón trasero de la Joyería M y M, para poder acceder a la pared que fueron a romper.

Ante el alerta, el personal policial se acercó al lugar y realizó una primera recorrida por el exterior, aunque no logró localizar a los sospechosos.

Cuando la policía inspeccionó la joyería, encontró un boquete de unos 50 centímetros de diámetro y varias herramientas tiradas en el piso.

Según se cree, los boqueteros se fueron a las apúradas y antes de tiempo, un poco por su fracaso y otro poco, porque tal vez advirtieron que habían sido vistos y podían quedar expuestos.

Cuando comprobaron que el lugar estaba despejado, los agentes realizaron una inspección más detallada y constataron que había un boquete de unos 50 centímetros de diametro en uno de los laterales del local, que da a un patio del local.

En el lugar, también encontraron varias herramientas que los delincuentes habrían utilizado para romper la pared, y que en el apuro por huir luego del absurdo error que habían cometido, quedaron esparcidas en el piso.

Cuando decidieron huir sintiéndose expuestos, los boqueteros no se equivocaron. A juzgar por los resultados de la investigacion, los detalles aportados por testigos permitieron rastrearlos.

Los allanamientos en Trelew y Rawson fueron supervisados por el Comisario Inspector Juan Carrasco (Jefe Área Investigaciones) y el comisario Pablo Lobos (Segundo Jefe del mismo sector), con la colaboración del grupo especial GEOP, personal de investigaciones de Rawson y Trelew, agentes de Policía Científica de las dos ciudades y de la seccional de la capital chubutense que está a cargo del comisario Fortunato Jara.