Trans se capacitan pero denuncian que las persiguen
Al lugar donde hacen talleres llegan hombres pensando que se prostituyen.
Por Pablo Montanaro - [email protected]
Un grupo de mujeres trans que asisten a diversos talleres de capacitación en oficios en la Casa Santa Teresita del Niño Jesús denunció que son víctimas de la persecución de hombres cuando salen del establecimiento, que tiene por finalidad ayudar y contener a este colectivo. Las mujeres también señalaron que reciben llamadas telefónicas al lugar, ubicado en Sarmiento y Candelaria de esta ciudad, pensando que ejercen la prostitución.
Amira, una de las mujeres que participa de las capacitaciones, explicó a LM Neuquén que cuando salen de “la casita”, inaugurada en mayo, “hay autos parados esperándonos, pensando que nosotras acá ejercemos la prostitución, y justamente esta institución está enfocada en ayudar a las compañeras a dejar el trabajo sexual”.
El hogar abrió sus puertas con el objetivo de articular acciones de prevención y tratamiento para la asistencia e inclusión de personas transexuales con consumo problemático de sustancias. Para ello, de lunes a viernes funcionan talleres de costura, peluquería, manicura, cerámica, tai chi y computación, que apuntan a fortalecer la inserción laboral del colectivo y actualmente reciben a entre 15 y 20 mujeres. Además, hay una biblioteca y asistencia psicológica disponible.
El proyecto fue impulsado por la hermana Mónica Astorga, de la congregación de Carmelitas Descalzas de Neuquén, que hace 14 años brinda ayuda a mujeres trans para alejarlas de la prostitución y las drogas.
Amira dijo que en muchas ocasiones “mientras estamos en algún taller llegan hombres golpeando la puerta y nos preguntan cuánto cobramos para tener relaciones sexuales. Les explicamos que esta es una institución para ayudar a las compañeras a abandonar la prostitución”.
Acompañamiento y contención
La Casa Santa Teresita del Niño Jesús se concretó a través del programa de Casa de Asistencia y Acompañamiento Comunitario (CAAC) que lleva adelante Sedronar para trabajar con grupos con alta vulnerabilidad social. También ofrece a quienes asisten a diario un desayuno, un almuerzo y una merienda.
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