El tradicional Jockey Club (G1) se resolvió en los escritorios y cambió al ganador. El Musical se quedó así sin el sueño de la tiple corona y se armó una batahola descomunal. ¡Había $ 10 millones al ganador!
Del final cabeza a cabeza al escándalo. Del sueño de la triple corona más cerca que nunca para un caballo en los últimos tiempos a las piñas. El Gran Premio Jockey Club (G1-2000 metros), el clásico más viejo del turf argentino y una de las carreras más importantes del año se definió en los escritorios, cambió de dueño y en el final se armó entre el entorno de ambos pingos y del ejemplar perjudicado con las autoridades.
En la pista había ganado El Musical, que como también se había adjudicado la Polla de Potrillos, quedaba a un paso de la triple corona, hazaña que ningún ejemplar logra desde 1996 (ganar las 3 carreras salientes del proceso selectivo).
Sin embargo, Adrián Giannetti, el jockey del escolta Natan, reclamó una supuesta molestia ocasionada por el vencedor en ese final reñido y tras algunos minutos de suspenso, en los escritorios decidieron sancionar a El Musical, conducido por Juan Cruz Villagra y otorgarle el triunfo a Natan.
Esto derivó en un verdadero escándalo, con ánimos muy calientes, tumultos y hasta piñas. Una batalla campal. Además de la gloria, el ganador se llevaba 10 millones de pesos, lo que no es un dato menor...
Una lástima que la fiesta del turf se empañe así...
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