Messi debutó con gol en la MLS y el Inter de Miami ganó un partido clave

Lionel Messi tuvo un debut especial en la Major League Soccer (MLS): el 10 descansó tras haber levantado la Leagues Cup y haber accedido a la final de la US Open Cup, pero disfrutó de unos minutos y le alcanzó para anotar un tanto en la victoria del Inter de Miami por 2-0 ante el New York Red Bull. Así, de la mano del campeón del mundo, el elenco comandado por Gerardo Martino rompió una racha de 11 pleitos sin triunfos en el torneo doméstico.

El elenco visitante salió al campo de juego con un equipo muletto, pero con el sello del Tata bien distinguible. Con la tenencia de pelota como bandera y la presión alta en la salida, el Inter buscó golpear aunque sin precisión. La ausencia de Sergio Busquets le quitó fluidez a la hora de la construcción, pero aún así los colistas lograron pergeñar una interesante jugada colectiva a los 6': Jordi Alba apareció por el sector izquierdo y lanzó un centro rasante para Diego Gómez, que no pudo conectar el balón de lleno.

El partido era chato y disputado, prácticamente sin ocasiones de gol y poca actividad en las áreas. Los anfitriones emparejaron el desarrollo mediante envíos aéreos y una serie de aproximaciones que llevaron a ajustar la atención en defensa.

Omir Fernández tuvo una chance aislada a los 30', tras una desatención de la defensa del club de Miami, pero las Garzas se pusieron en ventaja antes del cierre del primer tiempo: el volante paraguayo recibió la pelota tras una serie de rechazos y definió cruzado para poner el 1-0. El tanto provocó la celebración de Messi y de Busi en el banco de los suplentes, aguardando por su oportunidad.

El complemento mostró a un Inter más desdibujado y con complicaciones para controlar el pleito. Fernández volvió a tener otra posibilidad concreta de igualar el marcador de cabeza, pero el arquero Drake Callender voló en el aire para evitar el tanto. El astro rosarino debió ingresar a los 60' para cambiar la tónica del encuentro y su irrupción provocó una revolución: toda Nueva York se rindió ante el rey.

El ingreso de la Pulga tenía un claro objetivo: que el equipo rosa recupere el control del cotejo para cuidar la ventaja, a la espera de un contragolpe certero. Con la idea de acompañar al 10, el entrenador argentino envió a la cancha a Benjamín Cremaschi, que reemplazó a Facundo Farías.

De todas formas, el crack ex Barcelona desplegó toda su magia: le dio un pase fantasía al lateral español, uno de sus grandes socios en el club culé, y le puso el broche de oro al resultado. A los 89', cuando el encuentro se moría, Messi asistió en cortada al volante argentino, que le devolvió la gentileza y lo dejó solo con el arco vacío. La jugada, al mejor estilo Barcelona, coronó un duelo repleto de condimentos para el mejor del mundo, que no para de brillar.