Europa ofrece innumerables destinos para disfrutar de un viaje, pero algunos se destacan porque brindan una hermosa experiencia y son muy económicos.
A la hora de pensar en un viaje de placer, Europa suele ser uno de los destinos preferidos para los turistas de todo el mundo. Lleno de historia y paisajes paradisíacos, el viejo continente es ideal, pero, claro, hay que armar un presupuesto acorde a nuestros bolsillos para visitar los países más interesantes, y si son baratos, mucho mejor.
Europa tiene numerosos destinos que, por historia, cultura y bellezas naturales, pueden estar en la hoja de ruta de cualquier viajero. Y algunos de esos además son amigables con los bolsillos, un dato nada menor, especialmente si el plan es alargar la estadía lo más posible.
Encontrar estos países requiere un buen trabajo previo, hoy mucho más accesible por la tecnología. Desde casa podés investigar costos de alojamiento, comida, acceso a atracciones turísticas, transporte y experiencias culturales. Para ayudarte, te brindamos cuáles son en este 2024 los cinco países más baratos para visitar Europa y volver felices, y sin deudas.
Los cinco países más baratos para visitar Europa
Albania
Si querés vivir una experiencia única y ahorrar algo de dinero para el resto de tu viaje, Albania es un destino ideal. Tiene ciudades como Korca y Gjirokastra que van a satisfacer los deseos de aquellos turistas que busquen exploraciones culturales genuinas y opciones más económicas que el litoral de la Riviera albanesa.
Son ciudades cada vez más elegidas por su encanto histórico y arquitectónico. Korca es famosa por su ambiente juvenil y vida nocturna, potenciada por sus centros universitarios. Al ser elegida por los jóvenes locales y extranjeros, frece opciones de alojamientos muy baratos, con precios que van de los 20 a los 25 euros por noche cuando no es temporada alta.
Si no querés aprovechar las noches de fiesta y tu idea es explorar la cultura, Gjirokastra se distingue por su arquitectura otomana, reconocida por la UNESCO, y sus sitios antiguos ideales para los aficionados a la historia.
Lituania
Lituania es el destino más barato entre los Estados bálticos, con alojamientos muy económicos. Vilnius, la capital, es perfecta para explorar a pie la Plaza de la Catedral, el santuario de las Puertas del Alba y los Jardines Bernardinos, que fueron restaurados al detalle. Además, tiene una gran variedad de cafés económicos y una vibrante vida nocturna en su zona ribereña.
Kaunas, la segunda ciudad más grande del país, ofrece una experiencia más íntima para un par de días: el casco antiguo y excursiones únicas como la visita a la Colina de las Cruces y el Monasterio de Pazaislis.
Hungría y Polinia, dos países muy baratos y llenos de atractivos
Hungría
Hungría es uno de los destinos más baratos de Europa y tiene atracciones gratuitas, una gastronomía económica y una singular oferta en bares. Budapest está en el tope de los turistas por su animada vida nocturna, pero ciudades menores como Szeged y Pecs se destacan por su majestuosa arquitectura, sus pintorescos cascos antiguos y un bajo costo de vida.
Szeged atrae a sus visitantes con su rica oferta cultural, el margen del río y los edificios emblemáticos del Art Nouveau. Pecs seduce con su patrimonio cultural diverso, repleto de vestigios romanos, paleocristianos y otomanos. Estas dos ciudades, junto con Gyor y Debrecen, se destacan por su impresionante arquitectura.
Polonia
Si bien Polonia ha ganado fama y perdido algo de su atractivo económico, fuera de las principales ciudades turísticas (Varsovia y Cracovia) tiene precios razonables. Wroclaw y Gdansk y opciones todavía más pequeñas como Lublin, ofrecen experiencias diferentes por la hospitalidad, la comida, la bebida y la belleza de cada ciudad.
Wroclaw es un ejemplo a la hora de hablar de destinos baratos, incluso al hospedarse en sus hoteles boutique. Gdansk, la ciudad báltica de Polonia, es una excelente opción para alojarse, manteniendo el equilibrio entre calidad y precio.
Croacia, uno de los destinos de moda de Europa
Entre todos los países que atraen a miles de turistas en todas las estaciones del año, Croacia va ganando terreno dentro del turismo de Europa gracias a su impresionante costa, sus pueblos históricos y sus hermosas islas, combinadas con precios para todos los bolsillos. En la Costa Dálmata, ciudades como Zagreb y Split combinan buenos precios con experiencias culturales ricas y variadas.
Zagreb se distingue por su animada vida callejera, su arquitectura ecléctica y sus parques, con museos que tienen entrada gratuita en algunos días y opciones de comida muy económicas. Split, el corazón de la Costa Dálmata, es famosa por su Palacio Diocleciano romano antiguo, Patrimonio Mundial de la UNESCO, y su animado paseo marítimo Riva.
A pesar de su importancia histórica y su agraciada ubicación costera, Split tiene alojamientos muy baratos, desde hostels hasta departamentos muy accesibles, especialmente fuera del centro de la ciudad.
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