¡Sorpresa! El avión solidario de Enrique Piñeyro aterrizó por primera vez en Neuquén

El personal del aeropuerto Presidente Perón se sorprendió este viernes al ver sobre la pista de Neuquén una gran aeronave que se ha vuelto famosa en el mundo de la aviación. Por primera vez, la terminal aérea neuquina recibió al avión del actor, director de cine y piloto Enrique Piñeyro, un Boeing de grandes dimensiones que fue protagonista de muchas causas humanitarias.

Piñeyro, de 67 años, es reconocido como director por las películas Whisky Romeo Zulú y El Rati Horror Show, pero en los últimos años ganó mayor protagonismo por su faceta de piloto de avión y filántropo. En 2020, compró un Boeing 787 a la empresa Aeroméxico, que utilizó para distintas causas solidarias y puso a disposición de gobiernos y fundaciones en más de una ocasión.

Así, la aeronave trasladó a refugiados ucranianos y colaboró con la crisis migratoria en Europa. También el piloto lo puso a disposición para el traslado de vacunas a la Argentina durante la pandemia de coronavirus, pero se supo que su ofrecimiento no fue atendido por las autoridades.

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A su vez el 28 de marzo de 2021 realizó el vuelo más largo posible, entre Seúl y Buenos Aires durante más de 20 horas. "Vimos dos atardeceres y un amanecer, de una antípoda a la otra", publicó en sus redes sociales tras la travesía. Según se informó, el propio Piñeyro afronta todos los gastos de los traslados

Este viernes, el famoso Boeing, que ha sido ploteado con mensajes de paz durante diferentes conflictos internacionales, llegó a la ciudad de Neuquén. La capital de la provincia neuquina no era el destino final para el desarrollo de una causa humanitaria. Por el contrario, se trataba de un escala de paso para otro viaje.

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Los trabajadores del aeropuerto señalaron que era la primera vez que aterrizaba en Neuquén, y aclararon que el avión permaneció en la pista hasta la madrugada de este sábado, cuando partió hacia otro destino. "Fue una visita inesperada", aclararon los trabajadores, que aprovecharon para tomarle fotos.

Hoy, el Boeing ya no tiene mensajes ploteados pero sí el inconfundible nombre de SolidAire, su organización benéfica que busca colaborar con causas nobles a través de su pasión por los aviones.