En las últimas horas, la Policía Bonaerense detuvo a la madre biológica, Daniela A., y al padrastro, Nelson L.
En Saladillo, provincia de Buenos Aires, la tía de la niña de 13 años que recientemente dio a luz reveló graves irregularidades en el entorno familiar de la menor, asegurando que en esa casa "se vivían cosas turbias". El caso, que generó mucha indignación a nivel nacional y derivó en una pueblada, continúa causando revuelo a medida que pasan las horas.
La mujer, identificada como Rocío, admitió que en la vivienda de su sobrina "se vivían situaciones de maltrato físico y verbal", lo que afectó considerablemente la calidad de vida de la niña. Actualmente, tanto la madre como el padrastro de la adolescente están detenidos y enfrentan acusaciones muy serias por abuso sexual infantil.
Según relató Rocío a C5N, la menor no solo sufría agresiones constantes, sino que también padecía condiciones de vida precarias. “En esa casa no había comida suficiente, la higiene era deficiente y la niña a menudo deambulaba por las noches. La situación era insostenible”, declaró. Además, confesó que no estaba al tanto del embarazo de su sobrina, a pesar de haberla visto recientemente.
El dolor de la tía
La mujer explicó que, aunque la notó con un abdomen inusualmente prominente y comportamientos extraños, la adolescente atribuía su apariencia a una supuesta hinchazón por consumo de harinas. Rocío afirmó que la madre de la menor también negó tener conocimiento de la situación.
“Siempre quise un mejor futuro para mi sobrina”, enfatizó Rocío, quien había denunciado previamente las condiciones de vulnerabilidad que enfrentaba la adolescente. Sin embargo, lamentó que sus denuncias no hayan sido atendidas a tiempo, lo que podría haber evitado el desenlace actual. También explicó que, aunque le propusieron hacerse cargo de la menor y su bebé, no pudo aceptar debido a limitaciones económicas y a las demandas de cuidado que un recién nacido implica.
Detuvieron a los padres de la niña
En paralelo, la Policía Bonaerense detuvo a la madre biológica, Daniela A., y al padrastro, Nelson L., en un operativo realizado en la localidad vecina de Azul. El padrastro enfrenta cargos de abuso con acceso carnal, mientras que la madre está acusada de encubrir los hechos mediante un falso testimonio, agravado por su rol materno. Ambos comparecerán ante el fiscal Roberto Javier Berlingieri, quien está a cargo del caso.
El caso ha generado un gran revuelo en la comunidad local, derivando en episodios de violencia durante el fin de semana. En una muestra de indignación colectiva, grupos de vecinos intentaron atacar la vivienda de los detenidos, así como el domicilio de la fiscal Patricia Hortel. Este último fue incendiado, a pesar de que Hortel no tiene participación directa en la causa. La fiscal Juan Cruz Condomí Alcorta está investigando este ataque, que ya cuenta con dos detenidos. La Asociación de Fiscales de la Provincia de Buenos Aires repudió el hecho en un comunicado, subrayando la importancia de proteger a quienes ejercen la labor judicial.
La investigación inicial comenzó cuando la madre de la víctima informó en la Comisaría de la Mujer de Saladillo que la menor cursaba un embarazo de ocho meses. Posteriormente, la adolescente dio a luz en el Hospital Posadas. En un principio, se señaló a otro sospechoso, pero la menor declaró que su padrastro era el presunto abusador. Este testimonio fue crucial para las detenciones posteriores.
El caso sigue en investigación, mientras las autoridades buscan esclarecer los hechos y garantizar justicia para la adolescente y su recién nacido. En tanto, la comunidad de Saladillo permanece conmocionada por la magnitud de los hechos y las consecuencias que estos han generado en el ámbito social y judicial.
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