Una salvaje pelea en Mendoza terminó a sillazos entre los empleados y clientes

Una feroz pelea se desató en las calles de la ciudad de Mendoza entre empleados, clientes de bares y personas que pasaban por el lugar. Ocurrió como consecuencia de una discusión previa protagonizada por guardias de seguridad y una mujer que ingresó al comercio a pedir dinero.

Según publicó MDZ, esta persona entró a "La Doña", ubicado sobre la Avenida Arístides Villanueva, en la madrugada del lunes y les habría solicitado dinero a los comensales. Inmediatamente guardias del establecimiento le pidieron que se retirara.

Fue entonces cuando la mujer habría escupido a los custodios y dio inicio a la riña. Sin motivo aparente, un grupo de hombres que cenaba en otro establecimiento se acercó al lugar de los hechos y contribuyó a intensificar la disputa.

La imágenes que se viralizaron en las redes sociales muestran a clientes y empleados lanzándose piñas y sillas unos a otros, incluso, un joven toma una botella de vidrio que encontró en el suelo y amenaza con utilizarla como arma. En medio del conflicto, dos agentes de las fuerzas de seguridad arribaron a la zona e intentaron controlar la situación. Sin embargo, en vez de tratar de desalentar la actitud de los agresores, los golpean y encienden aún más los ánimos.

Fabián, dueño del local donde se produjeron los disturbios del pasado lunes, dijo a MDZ Radio: “Es lamentable. Lo que pasa es que hay muchísima gente que sale a pedir y algunos de ellos también salen a robar”. Luego, narró la secuencia de hechos que derivaron en la salvaje pelea.

“En la última hora de la noche, cuando había gente cenando todavía en uno de nuestros locales, ingresa una persona femenina a tomar contacto con la gente que estaba comiendo”, relató y aaseguró que le pidió “por favor” que se retire. “Cuando sale a la vereda, esta señora empieza a gritar como que la están maltratando”, explicó.

“A la discusión, se sumaron entonces tres personas que no tenían nada que ver con la situación y empezaron a preguntarle al encargado por qué estaba maltratando a la persona. Intentaron golpearlo. Eso llevó a la gente que estaba comiendo y los empleados salieron en su defensa”, añadió a continuación.

Y completó: “Finalmente, otros 15 o 20 individuos más, que tampoco tenían que ver con la situación, se unieron al riña y terminaron atentando contra nuestro local al tirar sillas y enfrentarse con el personal”. El conflicto cesó tras la llegada de cinco patrullas y varios efectivos al lugar.

Finalmente, quedó asentado -según informó el Ministerio de Seguridad- que el dueño del local se va a reunir con demás comerciantes de la calle Arístides Villanueva para intentar dar solución a los problemas de inseguridad en la zona.