Informaron que tiene 20 años de antigüedad, pero no dieron el nombre. Se desempeñaba en el cuartel de Trevelin y ya interviene la fiscal de género de Esquel.
Un escándalo sacude al cuerpo de Bomberos Voluntarios de Trevelin, en la provincia de Chubut, luego de que varias mujeres denunciaran por acoso a un jefe con más de 20 años de antigüedad, quien ya presentó su renuncia.
Rubén Oliva, presidente de la Asociación de Bomberos Voluntarios de la localidad cordillerana confirmó la grave situación que atraviesa la institución.
"El número de víctimas se va a determinar; nosotros no juzgamos y todo está en manos de la fiscal", señaló el también titular de la Federación de Bomberos Voluntarios de la provincia, en referencia a la fiscal de género Rafaella Ríccono, quien lleva adelante la investigación desde la ciudad de Esquel.
Según los primeros reportes, serían entre cinco y seis las bomberas voluntarias que habrían sido acosadas por el jefe ahora renunciante, cuyo nombre no fue difundido públicamente.
Contención en el cuartel de Chubut
La institución implementó como primera medida un trabajo interdisciplinario que incluye profesionales de psicología clínica, psicología de la emergencia, psicología social y el área de género de la Federación para contener a las víctimas.
"Se trata de una situación bastante compleja, porque se debe dar contención principalmente a las bomberas voluntarias que habrían sido víctimas de acoso, y al personal en general, porque afecta a todos y a sus familias", explicó el titular del cuartel.
Las denuncias fueron realizadas inicialmente de manera interna, cuando las afectadas expusieron la situación ante dos bomberas de mayor jerarquía. Aunque Oliva indicó que existirían "una o dos" denuncias ya formalizadas ante el Ministerio Público Fiscal.
A pesar del escándalo, las voluntarias continúan prestando servicio en el cuartel, aunque se las ha eximido de cumplir con sus turnos de guardia obligatorios, mientras reciben el acompañamiento profesional correspondiente.
Antecedente reciente en Entre Rios
El caso de Trevelin tiene un antecedente similar y muy reciente en la ciudad entrerriana de La Paz, donde el jefe del cuerpo de Bomberos Voluntarios, Julio Héctor Tentor, renunció tras ser denunciado por tres compañeras por acoso y hostigamiento.
En este caso, el superior se alejó de su cargo luego de tomarse 15 días de licencia ante las graves acusaciones.
En su escrito de dimisión, aseguró ser "blanco de denuncias mediáticas y judiciales" que buscaban "el corrimiento" de su cargo y "menoscabar" su integridad, pidiendo además "continuar trabajando en aspectos relevantes y anhelados" para la institución.
La Comisión Directiva de la Asociación de Bomberos Voluntarios de La Paz emitió un comunicado donde repudió "la violencia en todas sus formas" y revalorizó "el espacio de las mujeres en actividades que hacen al bienestar de la comunidad", mientras que dejaron en manos de la Justicia la resolución de las denuncias.
Las acusaciones contra Tentor son graves. La primera denuncia, presentada el 16 de febrero por una bombera de 39 años, relata que el ex jefe le habría pedido mantener relaciones sexuales con él y con "dos altas autoridades" de la Policía de Entre Ríos en La Paz, prometiéndole que "conseguiría mejor pasar" si accedía. Ante su negativa, el acoso se intensificó, obligándola a renunciar en enero.
En marzo se sumaron otras dos denuncias. Una bombera de 30 años con más de 13 años de trayectoria en la institución confirmó que Tentor realizaba llamados telefónicos constantes y la visitaba en su domicilio fuera de horarios laborales.
Otra compañera, de 32 años, denunció haber recibido más de 30 llamadas y mensajes diarios con distintos tipos de acosos y hostigamientos.
Frente a estas acusaciones, el juez Raúl Damir Flores dispuso medidas de restricción y prohibición de acercamiento a las víctimas, además de prohibirle a Tentor realizar cualquier tipo de acto violento, molesto o perturbador contra las denunciantes o testigos del caso.
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