Ladrón muerto en Canal V: estaba con libertad condicional y la pena se agotaba recién en octubre

El ladrón que fue baleado mortalmente por un policía en la noche del martes en el barrio Canal V se encontraba gozando de un régimen de libertad condicional. El 21 de marzo de 2022 había sido condenado a tres años de cárcel efectiva por una seguidilla de delitos como portación de arma de fuego, encubrimiento, amenazas y violación de domicilio.

El hombre identificado como Pablo Ulises Vallejos, de 22 años, contaba con múltiples antecedentes y hasta una condena en la vecina ciudad rionegrina de Cipolletti, dictada en marzo de 2022. Justamente su detención en Río Negro permitió avanzar con una unificación de penas y su traslado a la Unidad de Detención 11 de Neuquén capital.

En la última sentencia condenatoria que recayó sobre Vallejos, se consideraron los delitos de portación de arma de fuego de uso civil en calidad de autor, encubrimiento, robo simple en calidad de coautor y tenencia ilegal de arma de fuego de uso civil.

Fuentes judiciales resaltaron que, mediante un acuerdo pleno, Vallejos recibió un castigo definitivo de tres años y que recién el 14 de octubre de este año quedaría agotada la pena.

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¿Quién controlaba las pautas de la libertad condicional?

Mientras la fiscalía neuquina avanza con la investigación sobre el hecho ocurrido anoche en la ciclovía, en el barrio Canal V, también seguramente surgirán novedades sobre el seguimiento que se le estaba realizando a Vallejos debido a que debía cumplir con distintas pautas de conducta porque se encontraba bajo libertad condicional.

Para la Policía de Neuquén no era un desconocido y así lo revelaron hoy los jefes de la institución. El superintendente de Investigaciones, el comisario Dante Catalán, indicó que la víctima era un joven de unos 22 años "conocido del ambiente delictivo". Agregó que "había sido demorado el mes anterior por un hecho similar y tenía antecedentes por otros hechos de similares características".

En tanto, el Ministerio Público Fiscal confirmó que el arma de fuego que habría portado Vallejos era un revólver calibre 32 largo, “con cinco balas con signos de haber sido percutadas”. En cuanto al revólver, tenía la numeración limada.

Tanto la pistola de nueve milímetros del policía como el revólver que habría portado Vallejos fueron secuestrados y el resultado de las pericias serán fundamentales para establecer las circunstancias del frustrado asalto y posterior homicidio.

Buscan cámaras en el barrio Canal V

La fiscal que está al frente de la investigación es Silvia Moreira y una de las medidas que adoptó en la tarde del miércoles fue ordenar la liberación del policía, que había sido demorado el martes por la noche. Entre las novedades destacadas, la representante de la parte acusadora adelantó que no está contemplada una formulación de cargos en el corto plazo. Los investigadores indicaron que el atraco al policía ocurrió alrededor de las 23:20, a la altura de las calles 12 de Septiembre y Andalgalá, y que fue protagonizado por Vallejos y un cómplice.

Además de las pericias en las armas incautadas, los responsables de la investigación ya iniciaron el relevamiento de imágenes de cámaras de seguridad de la zona para tener precisiones de los movimientos de los delincuentes.