Violento va preso por amenazar de muerte a su ex pareja

A través de un acuerdo de partes, un violento de Cutral Co recibió un año de cárcel por un hecho de violencia de género contra su ex pareja. El hombre la amenazó de muerte en dos oportunidades, por lo que ahora se le impuso una pena de prisión efectiva.

En una audiencia realizada este lunes, la fiscal Ana Mathieu presentó el acuerdo alcanzado con la defensa del imputado y detalló ambos hechos por los que fue condenado. Teniendo en cuenta la crisis carcelaria y que el violento no tenía antecedentes penales, se resolvió que la condena la cumpla bajo la modalidad de detención domiciliaria.

El primer ataque tuvo lugar el 27 de mayo de 2021, cuando el imputado, identificado por sus iniciales como L.A.A, se presentó en la casa de su ex pareja en Cutral Co y, utilizando una navaja, le advirtió que la iba a matar. En esa oportunidad, la mujer tomó un cuchillo e hirió a su agresor en una mano.

Ese hecho fue calificado como el delito de amenazas efectuadas en un contexto de violencia de género, agravadas por el uso de arma blanca. Si bien por ese hecho accedió a una suspensión de juicio a prueba, el 25 de septiembre perdió la probation al volver a cometer un delito, precisamente al incumplir una restricción de acercamiento hacia la casa de su ex pareja.

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"Volvió a presentarse en la casa de su ex pareja, ingresó, la golpeó y la amenazó de muerte", detalla la teoría del caso y respecto a este segundo hecho, la fiscal le atribuyó los delitos de violación de domicilio, lesiones leves agravadas por el vínculo y por mediar violencia de género; amenazas simples y desobediencia a una orden judicial, todo en concurso real y en calidad de autor.

Al momento de solicitar la pena, Mathieu consideró que el condenado no registra antecedentes penales y que desde el segundo hecho ha cumplido con todas las medidas dispuestas en el marco del proceso judicial y que el acuerdo cuenta con el aval de la víctima.

Se planteó que el hecho de "cumplir la condena en su domicilio tiene relación con la falta de plazas disponibles en las unidades de detención". Es por ello, que como medida de seguridad adicional, la fiscal solicitó que continúe controlado por la pulsera electrónica que se le colocó el octubre del año pasado luego del segundo hecho de violencia de género.

Finalmente, tras escuchar a las partes, el juez de garantías Mario Tomassi homologó el acuerdo e impuso la condena solicitada.