Se puso picante: los pibes de Newell's festejaban y los de Central no se la bancaron

El clásico rosarino empezó mal. En el partido de reserva, los jugadores de Rosario Central no se bancaron que los de Newell's festejaran la victoria en su cancha y casi terminan a las piñas.

La Lepra se quedó con el clásico de reserva este viernes al mediodía, al vencer por 2 a 0 a Central con goles de Enzo Cabrera y Nazareno Funez.

En el final hubo festejo de Newell's, como siempre sucede cuando hay un ganador, pero los jugadores de Central reaccionaron y fueron a buscar a sus rivales en el centro del campo de juego. Intervinieron varios auxiliares y casi hubo trompadas.

Cuando terminó el partido, consumada la victoria rojinegra en reserva, los dirigidos por Federico Hernández se abrazaron en la mitad de la cancha y comenzaron a saltar y a cantar.

En el festejo, los pibes dirigidos por Federico Hernández le dedicaron el triunfo a su clásico rival: "Otra vez será, sin aliento, otra vez será" cantaron en medio del Gigante de Arroyito. Los del Canalla reaccionaron, se armó un gran aglutinamiento de gente que sumó a los cuerpos técnicos y auxiliares para separar y evitar un mal mayor. Luego de un rato de tumulto, la cosa se tranquilizó y los futbolistas se fueron a los vestuarios.

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Con esta victoria, Newell's se mantiene expectante en la Zona 2, ya que suma 20 puntos y si derrota al clasificado Sarmiento de Junín se meterá en los cuartos de final. El panorama es diferente en Rosario Central, que se ubica anteúltimo con solamente siete unidades.