Los investigadores ya descartaron un crimen en ocasión de robo. Lo encontró una de sus hijas cuando fue a visitarlo.
Un supervisor del Sistema Provincial de Salud (Siprosa) de Tucumán fue encontrado asesinado a puñaladas por su hija en su casa de la capital tucumana. Ahora, los investigadores analizan las circunstancias del crimen.
Se trata de Ariel Marino Sandes (57), quien se desempeñaba como supervisor de personal de la entidad y fue encontrado muerto el viernes por la noche en su casa del pasaje Lagos al 700, del barrio Villa Luján de la capital.
Fuentes judiciales informaron que una de las hijas del hombre intentó comunicarse en varias oportunidades con su padre. Sin embargo, la mujer no pudo hacerlo, por lo que se dirigió a su casa donde vivía solo.
Al llegar al lugar, alrededor de las 20.30, encontró la puerta de la vivienda abierta, ingresó y en una habitación vio que su padre estaba tendido en el piso, con la cabeza debajo de una cama y el rostro ensangrentado. La chica llamó a la Policía y al personal de emergencia del 107, quienes verificaron que Sandes ya había fallecido.
Los investigadores señalaron que, de acuerdo con el primer examen médico-legal, el cuerpo presentaba varias heridas punzo penetrantes en la zona del tórax y la espalda. Interviene en el caso la Unidad Fiscal de Homicidios I, encabezada por Ignacio López Bustos, quien dispuso las actuaciones de las distintas áreas del Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF), a los fines de llevar a cabo las pericias correspondientes.
También estuvo presente personal del Equipo de Contención y Acompañamiento a la Víctima (ECAV). Desde la Fiscalía precisaron que en la escena del hecho no se halló el celular de la víctima aunque, en principio, se descartaría la hipótesis de un crimen por robo. Esto es así porque no se observó desorden, ni se verificó el faltante de elementos de valor, y tampoco se determinó que los ingresos al inmueble hayan sido forzados.
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