Chiquito Romero lanzó una fuerte advertencia en la previa al partido con Palmeiras

Sergio Chiquito Romero, el arquero que se ha convertido en una pieza clave en Boca Juniors para llegar a las semifinales de la Copa Libertadores, ha compartido sus pensamientos sobre su regreso al fútbol argentino y sus expectativas para el importante enfrentamiento contra Palmeiras por la semifinal de la Copa Libertadores.

El experimentado arquero comenzó hablando sobre su paso por Racing Club, donde se abrió la puerta para entrenar en el predio Tita Mattiussi después de su regreso de Europa. Sin embargo, Romero expresó su sorpresa por la falta de interés de la dirigencia de Racing en contratarlo oficialmente: "Soy un agradecido a Racing. Salí de ahí y fue el club que me abrió las puertas del predio Tita Mattiussi para entrenar cuando volví lesionado de Europa, pero los dirigentes no se acercaron nunca ni para decirme hola. Porque si me hubiesen hecho una oferta, seguramente la hubiera aceptado".

El arquero también destacó que recibió un trato diferente por parte de Boca Juniors y el vicepresidente del club, Juan Román Riquelme, quien se mostró interesado en su incorporación: "Pero nunca me llamaron y Juan Román Riquelme sí lo hizo. Y no quería seguir esperando para después ver qué pasaba, como me ocurrió en la temporada anterior, cuando lo hice y resulta que cerró el libro de pases y tuve que arreglar con Venezia, en Italia, como libre".

A pesar de su paso por Racing y los silbidos que recibió en su último enfrentamiento contra Boca, Romero dejó abierta la puerta a un posible regreso a la Academia en el futuro: "A pesar de eso nunca le voy a cerrar las puertas a Racing, porque mi contrato con Boca termina en diciembre de 2024 y uno nunca sabe qué le depararán las vueltas de la vida".

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En cuanto a su presente en Boca Juniors y las semifinales de la Copa Libertadores, Romero señaló su preocupación por la cancha de Palmeiras, que cuenta con césped sintético: "Lo que más me preocupa de estas semifinales de Copa Libertadores es ir a jugar a la cancha de Palmeiras con el césped sintético. Si está buena no hay problema, pero hay algunas muy duras en las que cada vez que te tirás, te duele todo, cadera, rodillas".