Colapinto mostró su frustración tras impactar y destrozar su auto en Las Vegas donde venía con buen ritmo para meterse en la Q3 de la clasificación.
Las últimas semanas de Franco Colapinto fueron de una alta carga emocional, principalmente en el fin de semana del Gran Premio de Brasil donde esperaba disfrutar una fiesta de los argentinos que se acercaron a hacerle el aguante al oriundo de Pilar pero dos golpes importantes afectaron su estado emocional: la muerte de su abuelo y el choque en la carrera donde destrozó el monoplaza.
La imagen del monoplaza que lleva tatuado el 43 en su frente destrozado por un fuerte impacto volvió a verse en el Gran Premio de Las Vegas luego de tres prácticas donde había hecho una gran mejoría y cerró la P3 con un puesto 8 importante. De hecho, en la clasificación de esta madrugada el piloto avanzó a la Q2 y venía haciendo una buena tarea para meterse en el top 10 para la parrilla de largada del domingo, pero un mal cálculo lo hizo golpear contra el muro y destrozar el auto.
El gesto desolador de Franco volvió a verse como en Brasil. Sin comprender lo que había sucedido, entendiendo que todo indicaba un gran trabajo para avanzar a la fase decisiva, el piloto de Williams se bajó del monoplaza y con muchos gestos de tristeza golpeó el alo del auto demostrando su deshazón.
Luego, una vez detrás del muro de seguridad que divide al circuito con las tribunas, Colapinto se quitó el casco, miró al suelo y se sentó con cara de desilusión. Rápidamente fue llevado a realizarse los chequeos médicos para constatar que esté bien físicamente para poder correr este domingo, en caso que los mecánicos del equipo logren arreglar el auto.
Qué pidió el jefe de Williams tras el choque de Colapinto en Las Vegas
Fue James Williams, jefe de la escudería británica, quien en las redes sociales del equipo dio explicaciones sobre el estado de salud del joven piloto de 21 años. "Como todos deben estar al tanto, Franco tuvo un accidente grande en la Q2 mientras se encontraba en una vuelta muy buena. El impacto fue de más de 50G, lo cual es serio en cualquier mundo", dijo James y agregó: "Fue al centro médico y fue dado de alta. Ahora está de regreso a su hotel para descansar durante la noche. Será evaluado mañana y se determinará si está en condiciones de correr o no".
Sumado a esto, Wolves expresó: "Su coche está siendo reparado. El chasis está siendo cambiado y nos aseguraremos de que esté listo en caso de que pueda correr. Su salud es la prioridad por encima de todo. La fibra de carbono puede repararse, el metal y los autos pueden hacerse nuevamente, pero la salud de los individuos no".
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