Por qué Lautaro Martínez estuvo en La Bombonerita y desató cánticos en su contra

Los jugadores de la Selección argentina regresaron a la Argentina tras la victoria ante Chile y aprovecharon los momentos libres para visitar a la familia y actividades que dispersen su mente en una temporada cargada de partidos y emociones. Lautaro Martínez aprovechó para ver a su hermano basquetbolista Jano Martínez que enfrentó con Ferro a Boca en La Bombonerita.

Retratado por los medios presentes, el delantero campeón del mundo apareció vestido de negro y con capucha para pasar desapercibido en el estadio de uno de los principales rivales que tiene la Academia. "¡Te esperamos en el Etchart cuando gustes, campeón!", escribió la cuenta oficial de Ferrocarril Oeste.

No fue un partido más para el hermano de 22 años de Lautaro, sino que se trató del primer choque por los cuartos de final de la Liga Nacional. Más allá de la atenta mirada del campeón del mundo, Ferro cayó en su visita por 85-71, aunque el oriundo de Bahía Blanca le dio al equipo 11 puntos, cinco asistencias y tres rebotes.

Allí tuvo un recibimiento con saludos y elogios por la mayor parte de los hinchas que le reconocieron los títulos logrados con la Selección argentina y le demostraron su cariño. Sin embargo un grupo entonó por minutos: "Racing botón".

El día después del baile total: el Inter de Lautaro Martínez perdió 5 a 0 ante PSG

El Paris Saint-Germain protagonizó una actuación inolvidable en la final de la Champions League y goleó 5-0 al Inter de Italia de Lautaro Martínez para levantar su primera “Orejona”.

Los autores de los goles fueron Achraf Hakimi, Federico Dimarco (en contra), Désiré Doué, Khvicha Kvaratskhelia y Senny Mayulu. De esta manera, los dirigidos por Luis Enrique registraron la mayor goleada en una final de Champions League.

La mayor diferencia en una final de esta competición, que es la más importante a nivel clubes en Europa, había sido por cuatro goles, con Real Madrid (1960), Bayern Múnich (1974) y Milan en dos ocasiones (1989 y 1994).

Este triunfo, además, le permitió al PSG convertirse en el segundo equipo francés en ganar la Champions. El único que lo había conseguido fue el Marsella en 1993.

El dato clave, y que ahora se ha cumplido otra, indica que cada vez que Múnich albergó una final de la máxima competición europea, el ganador fue un club que levantó el trofeo por primera vez en su historia. Esta estadística generaba una expectativa extra y, tal como sugería la historia, la final de este año consagró a un nuevo monarca europeo.

El PSG se impuso de forma contundente y con goleada ante Inter en un emocionante encuentro, logrando así su primera Champions League. La victoria no solo representa la culminación de un ambicioso proyecto deportivo, sino que también inscribe el nombre del club parisino en la selecta lista de campeones de Europa, manteniendo viva la curiosa tradición de Múnich.