Familias de los jardines 32 y 23 piden celeridad en la investigación judicial
Piden que los docentes sospechados de haber cometido abusos sexuales en los jardines 32 y 23, sean detenidos. Avanzan con los testimonios.
Las familias de la comunidad educativa de los jardines de infantes 32 y 23 de Neuquén capital, donde se investigan a docentes por supuestos casos de abuso sexual, se movilizaron este lunes a la Ciudad Judicial para reclamar que se encarcele a los dos profesores sospechosos. Esperan más celeridad en la investigación y piden asistencia psicológica.
Desde las 9 de la mañana, un grupo de madres y padres de los estudiantes se apostaron sobre la Avenida Leloir y cortaron el tránsito para reclamar ayuda tras la situación que están atravesando con sus hijos.
"La semana pasada el fiscal nos había dicho que solamente con una cámara gesell positiva ya podían meterlos presos y hoy nos enteramos que una de las cámaras a un niño del jardín 32 dio positivo, así que esperamos que se haga justicia", lanzó a LMNeuquén Rosana, una de las manifestantes.
La mujer comentó que este lunes les dijeron que hay esperar que los psicólogos elaboraren un acta de la situación para determinar el futuro de los sospechosos.
"Nosotros vamos día a día viendo qué es lo que podemos hacer y el tipo está suelto, no sabemos si pueden existir más víctimas. Lo que pedimos es que lo metan preso, que los metan presos a los dos, no puede estar suelto una persona así", insistió la mamá.
La mujer denunció además que no recibió ninguna atención psicológica ara su hija ni tampoco para ella, y dijo que eso se repite en varias familias damnificadas.
Las denuncias comenzaron el pasado lunes cuando familias del Jardín 32 irrumpieron en el colegio de sus hijos angustiados al conocer que había denuncias por presunto abuso sexual por parte de un profesor de música de la escuela. Madres y padres ingresaron casi a la fuerza a la institución que estaba cerrada para reclamar respuestas a los directivos.
Luego llegaron funcionarios del Consejo Provincial de Educación (CPE), quienes intentaron calmar a las familias.
Al día siguiente, se conoció que en el Jardín 23 había un caso similar. Algunas familias se enteraron en la puerta de la escuela de boca de la mamá de una de las presuntas víctimas que había denunciado ante la justicia al profesor de educación física. Eso generó una reunión espontánea en el Salón de Usos Múltiples (SUM) de la escuela que duró varias horas, aunque muchas familias no se volvieron a sus casas tranquilas.
En tanto, el miércoles el propio ministro de Educación, Osvaldo Llancafilo dio a conocer que desde abril pasado se investigaba otros hechos en el Jardín 47 de Rincón de los Sauces. Allí existirían dos casos, advertidos en el hospital local, y apuntarían a un profesor de Educación Física.
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