Robert Prevost, primer Papa de la Orden de San Agustín: un cambio histórico en el Vaticano

El nuevo Papa, León XIV, ingresó al noviciado de los agustinos en 1977. Es la primera vez en la historia que un cardenal perteneciente a la Orden de San Agustín alcanza el papado. Esta comunidad de tradición mendicante, fue fundada en 1244 y está presente en más de 40 países al rededor del mundo.

Una orden religiosa es una comunidad católica que puede incluir sacerdotes, monjas, monjes y hasta laicos. Se dedican a un tipo particular de misión y espiritualidad.

El papado fue conseguido por pontífices jesuitas, franciscanos, dominicos y benedictinos, pero es la primera vez que es alcanzado por uno perteneciente a la orden de los agustinos.

Robert Prevost, a partir de ahora León XIV, es también el primer papa estadounidense y el segundo americano, luego del papa Francisco.

La Orden de San Agustín se caracteriza por su énfasis en la vida comunitaria, la búsqueda de la verdad a través de la teología y la predicación, y su compromiso con la pastoral. El perfil de Prevost está ligado fuertemente a la espiritualidad y la misión.

El origen de la Orden de San Agustín

La comunidad agustiniana es una de las grandes órdenes de la Iglesia. Nace de la unión de movimientos eremíticos espontáneos surgidos en Italia durante el siglo XII y el deseo de la Iglesia de consolidarlos bajo una regla común. Aunque su nombre homenajea a San Agustín de Hipona, no fue fundada por él.

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San Agustín de Hipona dio nombre a la orden de los agustinianos

Dos pioneros que marcaron el camino hacia la futura orden fueron Juan Bono, de Mantua, y Guillermo de Malavalle, un penitente francés que vivió en Toscana. Ambos formaron comunidades informales y compartían una vida de austeridad y fraternidad.

El 6 de diciembre de 1243, el Papa Inocencio IV, convocó a los ermitaños de Toscana a unificarse en una orden religiosa bajo la Regla de San Agustín. En marzo de 1244 finalmente se concretó el encuentro en Roma, bajo la guía del cardenal Ricardo Annibaldi.

En esa reunión se estableció el uso de un hábito negro con cinturón de cuero, se organizaron las primeras constituciones y se eligió un prior general.

En 1256 nació oficialmente una de las cuatro órdenes mendicantes reconocidas por la Iglesia, cuando el Papa Alejandro IV incorporó a comunidades eremíticas de otras regiones, consolidando la orden bajo el nombre de Hermanos Ermitaños de San Agustín en 1256.

Los pilares de la Regla de San Agustín fueron establecidos en el siglo V y ellos son: la vida en común, la búsqueda interior de Dios y la caridad fraterna.

A diferencia de otras órdenes los agustinos surgieron por iniciativa eclesial, adoptando a San Agustín como guía espiritual.

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El nuevo papa agustiniano León XIV

Rápidamente, esta nueva orden comenzó a expandirse a través de Italia, España, Francia y Alemania. Debido a la colonización europea, sus miembros participaron en misiones en África, Asia y América Latina, por lo que su extensión a estos territorios fue inminente.

En Estados Unidos, la presencia agustiniana comenzó en 1794 a manos del obispo John Carroll, cuando solicitó refuerzos a la Iglesia irlandesa para atender a los católicos del nuevo país. En paralelo, el primer fraile agustino, John Rosseter, llegó a Filadelfia. Unos años mas tarde lo hizo Matthew Carr, quien fundó la Provincia de Santo Tomás de Villanova, núcleo de la expansión agustiniana en el noreste de Estados Unidos.

Actualmente la orden a la que pertenece Prevost, está presente en más de 40 países y tiene una fuerte presencia en contextos urbanos y multiculturales, donde promueven el ideal de “comunidad en medio del mundo”.