Compraron sus terrenos a una mutual de Neuquén y se enteraron de que la chacra ya había sido rematada

Después de más de 10 años de lucha por la estafa de la Mutual 3 de Diciembre Participar, unas 45 familias de Neuquén comenzaron a hacer los primeros trabajos para abrir las calles y limpiar las manzanas de sus lotes. Pero el motor de la máquina tuvo que frenar ante la intimación de un grupo de desarrolladores, que habían comprado en un remate, y por un precio irrisorio, la misma chacra que les habían adjudicado.

Así lo denunció Carina, una de las vecinas damnificadas por la mutual, que nunca les entregó lo lotes que habían pagado entre 2013 y 2014, en una chacra ubicada en Valentina Norte Rural. Tras firmar los boletos de preadjudicación y participar de un acto de sorteo de los lotes, los vecinos esperaban por la entrega de los terrenos. Fue entonces cuando trascendió que la misma mutual había sido acusada de estafa por otro plan, en el barrio Confluencia.

"Nos llamaba la atención que pasaba el tiempo y no nos entregaban el lote", relató la mujer, que inició junto con sus vecinos un periplo judicial para poder acceder a las tierras que ya habían pagado en su totalidad. Finalmente, en 2021 se firmó una cesión de derechos en la que la mutual les cedía la totalidad de la chacra, que incluía no sólo sus terrenos sino otros 14 lotes ociosos en compensación por los daños ocasionados.

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"Teóricamente esa cesión de derechos nos separaba de la mutual para que pudiéramos estar tranquilos para gestionar con desarrolladora los servicios", dijo y aclaró que las empresas dedicadas al urbanismo se negaban a firmar contratos con la mutual, tras las denuncias de estafa.

Los 45 vecinos habían pagado sus lotes con servicios. Sin embargo, sólo consiguieron la adjudicación de las chacras para enfrentar ellos la instalación de cloacas, agua, gas y electricidad, así como los servicios de agrimensura y la apertura de calles. Pero esta semana, cuando realizaban algunas de esas tareas, se enfrentaron con otros desarrolladores, que habían comprado la chacra en un remate, sin tener en cuenta que ya se habían cedido los terrenos.

La historia del remate en Neuquén

Carina aseguró que los damnificados se enteraron del remate de casualidad, al detectar que había expedientes con nomenclaturas duplicadas en el Concejo Deliberante de la ciudad de Neuquén. Por un lado, estaba el pedido de los 45 vecinos, que pretendían ceder parte de los terrenos ociosos para que el Municipio desarrolle los servicios públicos en el barrio. Por otro lado, la venta de la chacra a un grupo de desarrolladores.

"En 2023 nos enteramos en enero de casualidad que se había aprobado la subasta a la chacra el 30 de diciembre y en enero aprobaron el remate en plena feria judicial", dijo la vecina y aclaró que los nuevos dueños pagaron un valor "irrisorio". "Por toda la chacra de 4,2 hectáreas pagaron 47 millones de pesos", dijo. Ese valor representa, hoy, el precio de un solo terreno en muchos barrios de la capital.

Como los vecinos cuentan con la documentación que respalda la adjudicación, además de los boletos de compra venta y la cesión de derechos de la mutual, su abogado les aconsejó que inicien la posesión de cada lote, algo que los compradores no se animaban a hacer por miedo a sufrir una denuncia por usurpación o un posible desalojo. Sin embargo, esta semana tuvieron un enfrentamiento con los que compraron la chacra en el remate.

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"Ayer tuvimos que actuar rápidamente, estando la máquina abriendo las calles, se acercaron los supuestos dueños que habían comprado en remate y le dijeron al maquinista que pare porque eran los dueños de la tierra", detalló la mujer y agregó: "Tuvimos una conversación hostil y amenazante, y después llegamos al diálogo".

En esa conversación, los supuestos dueños aseguraron que se iban a reunir con la Fiscalía y concertar una reunión para incluirlos. "Dijeron que iban a ver de qué manera nos pueden resarcir o que seamos parte de la urbanización pero no va a ser gratis", se lamentó la mujer, que no quiere volver a pagar por un terreno que ya tienen pago hace más de 10 años.

Según indicó, muchos de los vecinos perdieron los accesos a créditos Procrear o UVA para construir, porque estos programas exigían contar con la posesión del terreno. "Para nosotros es una angustia tremenda y nos hacen quedar como delincuentes", dijo Carina y agregó: "Con esta subasta aprobada, la toma de posesión dada, quedamos como delincuentes".

Aunque se sintió amenazada y prefirió no dar los nombres de los nuevos desarrolladores, aseguró que son personas que tienen vinculación con organismos provinciales, y que accedieron a un remate que no fue difundido y se dio en plena feria judicial. "Esto es más grande, nos damos cuenta como damnificados. Es una organización que se dedica a esto sistemáticamente", se alarmó.