Esta semana sufrió la pérdida de un lote de 20 mil pollas que dieron resultado positivo y le ordenaron sacrificar a 20 mil más por precaución.
El propietario de una granja avícola de Plottier que dio aviso a Senasa de un brote de gripe aviar y tuvo que sacrificar 20 mil pollas en recría denunció que el organismo sanitario ordenó el sacrificio de un nuevo lote que está en la misma granja, pero que no presenta síntomas y por el momento está sano.
Roberto Rivas explicó en declaraciones radiales que 15 días atrás hubo un brote, por lo que se comunicaron con Senasa para dar aviso de la situación. Luego se realizó un hisopado, que dio resultado positivo.
El hombre tiene alojadas en su predio 40 mil pollas en recría. Se trata de animales que ingresan a la granja desde que tienen un día, hasta las 20 semanas que empieza a poner el primer huevo.
En el lote que dio positivo de gripe aviar había 20 mil pollas y todas fueron sacrificadas entre el pasado martes y miércoles. "Menos mal que son animales de recría que todavía no están produciendo porque sino hubiera sido económicamente un resultado terrible para nosotros", aseguró el productor.
A 120 metros se encuentra el otro espacio donde tiene otras 20 mil pollas, de 6 semanas, que por el momento no manifestaron síntomas, pero desde Senasa les dijeron que también debían sacrificarlas.
En caso de que eso suceda, Rivas calculó que la pérdida económica que sufriría su empresa es de unos 40 millones de pesos. Además de la importante suma de dinero otro problema que se presenta es que "se corta el ciclo de producción y te quedás sin recursos", señaló.
"Logré que tuvieran paciencia y estoy en la espera. No se que va a pasar con ese lote que hasta ahora no manifiesta nada, está sano", detalló el hombre sobre la desesperante situación que vive y agregó: "Estamos a la expectativa de que este lote siga con esta conducta, esta sanidad, para poder sostenerlo".
Sobre el contagio de sus aves expresó: "No sabemos como se puede haber dado el virus con el aislamiento que tiene esta granja".
En ese sentido destacó que en el valle ya desaparecieron un millón de aves y que la situación es desesperante para los productores avícolas ya que no tienen forma de prevenir la enfermedad, ni tratarla una vez contagiadas. En caso de que se de un brote la única solución que tienen es matar a las aves.
Por ese motivo, aseguró que "la gente tiene miedo de denunciar (los casos positivos) porque les van a matar a todos los animales y por eso lo ocultan".
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