Las estafas virtuales son cada vez más comunes, y los estafadores utilizan tácticas engañosas para obtener información y realizar fraudes.
Las estafas virtuales se convirtieron en un problema común en la actualidad. Los estafadores se especializan en engañar a personas desprevenidas mediante diversas tácticas, muchas veces aprovechando el anonimato que proporcionan las llamadas de números desconocidos o marcados como “posible spam”.
Uno de los métodos más utilizados para llevar a cabo estas estafas implica una simple palabra: “sí”. Este artículo explora por qué es crucial evitar esta palabra y cómo protegerse contra tales fraudes.
El riesgo de las estafas virtuales
Cuando un estafador llama y solicita respuestas afirmativas a preguntas aparentemente inofensivas, el objetivo es obtener una grabación del “sí” de la víctima. Esta grabación puede ser utilizada para autorizar transacciones fraudulentas o inscribir a la persona en servicios que no ha solicitado.
A veces, las preguntas hechas por los estafadores incluyen confirmaciones de identidad, detalles sobre tarjetas de crédito o aceptación de ofertas. Los estafadores confían en que la víctima, al sentirse cómoda y sin sospechas, responderá afirmativamente, lo que puede poner en riesgo su seguridad financiera y personal.
Las grabaciones de estas respuestas pueden ser presentadas como pruebas de consentimiento en situaciones de reclamos o disputas. Por ejemplo, si un estafador tiene grabada la palabra “sí” de una víctima, puede utilizarlo para autorizar cargos en su cuenta bancaria o para inscribirla en suscripciones no deseadas.
Cómo protegerse de las estafas virtuales
Para protegerse de estos fraudes, es fundamental tomar ciertas precauciones. Aquí algunos consejos efectivos:
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Evitá Responder a Llamadas Sospechosas: Nunca atiendas llamadas de números desconocidos o que tu servicio telefónico identifique como “posible spam”. Es preferible dejar que la llamada vaya al buzón de voz y analizar su contenido posteriormente.
Usá Aplicaciones de Bloqueo de Llamadas: Existen aplicaciones que pueden bloquear automáticamente llamadas de números no deseados, reduciendo así el riesgo de ser víctima de estafas.
No Proporciones Información Personal: No des ningún dato personal a fuentes que no consideres completamente confiables. Las instituciones financieras y empresas legítimas nunca solicitan información sensible a través de llamadas telefónicas no solicitadas.
Protegé tus Cuentas: Utilizá contraseñas distintas para cada cuenta y activa el doble factor de autenticación para mayor seguridad. Las contraseñas deben ser robustas, cambiarse con regularidad y no compartirse.
Mantené Actualizados tus Dispositivos: Asegurate de que tu sistema operativo, navegador y aplicaciones estén siempre actualizados para protegerte contra vulnerabilidades.
Verificá el Origen de los Correos Electrónicos: Comprobá que los remitentes coincidan con los dominios oficiales de las entidades o empresas antes de abrir cualquier enlace o archivo adjunto.
Evitá Redes Públicas y Desactiva Funciones Innecesarias: No utilices redes públicas para realizar transacciones importantes y desactiva bluetooth, wifi o NFC cuando no sean necesarios para evitar conexiones automáticas.
No Compartas Códigos de Verificación: No reveles códigos de verificación recibidos por correo electrónico o mensaje de texto, incluso si parece que provienen de una fuente legítima.
Utilizá Antivirus y Antimalware: Tené un buen software antivirus y antimalware para detectar y neutralizar amenazas.
Desactivá Funciones de Localización y Multimedia Cuando No se Usan: Desactivá la ubicación, la cámara y el micrófono cuando no los necesites para evitar que aplicaciones o servicios maliciosos accedan a ellos sin tu consentimiento.
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