Patricia Bullrich denunció "madriguera K" en el Banco Nación

Patricia Bullrich, la candidata presidencial de Juntos por el Cambio, continuó su campaña crítica contra el gobierno kirchnerista a través de la plataforma de redes sociales X. En esta ocasión, dirigió sus críticas hacia Silvina Batakis, la presidenta del Banco Nación, después de que saliera a la luz que había otorgado aumentos salariales desproporcionados a algunos empleados y nombrado a conocidos en puestos privilegiados que apenas desempeñaban sus funciones laborales.

Bajo el lema "EL ESTADO COMO MADRIGUERA K", Bullrich expresó su descontento ante la creciente depreciación de los salarios de los trabajadores y jubilados, en contraste con los generosos aumentos salariales que se otorgaban a sí mismos los funcionarios públicos y la creciente contratación de personal en el Estado. En su mensaje, aseguró que esta situación cambiaría con su gobierno y que era el momento de hacerlo de manera permanente, utilizando el hashtag #EsAhora.

La controversia se desencadenó cuando en el programa de Jorge Lanata, que regresó a la pantalla de El Trece, se expuso cómo Batakis se había visto involucrada en un escándalo después de que el directorio del Banco Nación descubriera sus acciones dentro de la institución financiera. Según se informó en el programa, Batakis contrató a familiares en roles de alta responsabilidad y aprobó salarios millonarios sin previa consulta.

Además, la exministra de Economía designó a su expareja, Héctor Javier Silva, como gerente de Sistemas de planta permanente, lo que significa que el cargo se mantendría incluso después de las elecciones. Esto generó malestar dentro del directorio, ya que no se les había informado previamente.

La controversia no se detuvo aquí, ya que Batakis también permitió que la gerente general del banco, María del Carmen Barros, comenzara a percibir un salario que alcanza los 9 millones de pesos, incluyendo premios y bonos, sin consulta ni votación previas.

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Patricia Bullrich embistió a Batakis

Además, salió a la luz que el esposo de Barros, Juan Manuel Romero, formaba parte del equipo de manejo de camiones de caudales del banco, aunque su asistencia al trabajo era mínima. Incluso, se le acusó de utilizar la tarjeta corporativa para gastos personales y enfrentar cargos penales por intentar utilizar el camión de caudales para un viaje no autorizado.

Ante esta serie de acontecimientos, Patricia Bullrich, quien lidera una campaña en contra del kirchnerismo de cara a las elecciones de octubre, no perdió la oportunidad de criticar la gestión estatal y declaró que el Estado se había convertido en una "madriguera K."