El programa del Proyecto Mares y distintas áreas de la provincia apunta a orientar los operativos de limpieza y el tratamiento de desechos de la pesca.
En una acción conjunta para fortalecer la resiliencia de las áreas costeras y marinas protegidas de Chubut, recientemente se llevó a cabo el primer relevamiento aéreo en la provincia patagónica, con el objetivo de dimensionar el impacto de la contaminación plástica, especialmente la proveniente de la actividad pesquera, en áreas cruciales para la biodiversidad marina.
El operativo, de carácter interjurisdiccional, fue liderado por el Foro para la Conservación del Mar Patagónico y Áreas de Influencia, con la participación del Ministerio de Turismo y Áreas Protegidas de Chubut, la Secretaría de Ambiente y Control de Desarrollo Sustentable, la Secretaría de Pesca y la Administración de Parques Nacionales.
La iniciativa se enmarca en el “Proyecto MaRes”, un programa financiado por la Unión Europea para promover la recuperación de las áreas marinas protegidas en Argentina.
Vuelos en las costas de Chubut
Los relevamientos, autorizados por el Ministerio de Turismo y la Administración de Parques Nacionales, fueron ejecutados en dos etapas: la primera cubrió el Área Natural Protegida Península Valdés y la segunda, el Parque Interjurisdiccional Marino Costero Patagonia Austral y parte de la costa de Chubut.
“Estos vuelos son un recurso valioso para la toma de decisiones. Nos permiten identificar, a lo largo de toda nuestra costa y especialmente en nuestras áreas protegidas, los puntos más afectados y críticos”, señaló Nadia Bravo, Subsecretaria de Conservación y Áreas Protegidas de Chubut.
La funcionaria explicó que los relevamientos aéreos permiten identificar los puntos más críticos a lo largo de la costa y planificar limpiezas estratégicas, respetando el calendario faunístico. “Nuestro objetivo es proteger y conservar la biodiversidad de nuestra región, y valoramos profundamente este trabajo conjunto con el Proyecto MaRes”, añadió.
Un Mapeo Integral de la Costa
Cada relevamiento abarcó amplias zonas costeras de Chubut. En la primera etapa, el vuelo recorrió desde Playa Unión hasta Puerto Lobos, cubriendo el Área Natural Protegida Península Valdés y destacadas zonas como Punta Ninfas, el Golfo Nuevo y el Golfo San José.
La segunda etapa comprendió desde el sur de Rawson hasta Comodoro Rivadavia, pasando por el Parque Interjurisdiccional Marino Costero Patagonia Austral y recorriendo la costa continental, con un total de 1.329 kilómetros en ambos vuelos.
Juan Duro, Intendente del Parque Interjurisdiccional Patagonia Austral, destacó que el relevamiento es clave para orientar las acciones de limpieza con un menor impacto en la biodiversidad.
“Este relevamiento es esencial para entender la magnitud de la contaminación plástica en áreas clave para la conservación de la biodiversidad marina. La información que se revela nos permite orientar con mayor precisión las acciones de limpieza y remediación con el menor impacto en la biodiversidad”, afirmó.
“Son áreas sensibles y de difícil acceso; este esfuerzo interjurisdiccional refuerza nuestro compromiso con la protección de los ecosistemas costeros y marinos de Argentina”, consideró..
Datos Clave para la Gestión de Residuos
Además de mapear las áreas más afectadas, los relevamientos permitirán analizar el origen y la trayectoria de los residuos plásticos, en particular los de origen pesquero. Esta información se integrará con imágenes satelitales y estudios oceanográficos para coordinar estrategias de limpieza y remediación en sitios de difícil acceso.
«Desde la Secretaría de Ambiente, específicamente a través de la Dirección de Programas Ambientales, colaboramos activamente en el relevamiento aéreo de las costas de Chubut. Esta información es crucial para nosotros, ya que la utilizamos para procesar y determinar acciones específicas en diferentes áreas”, aseguró el titular del área, Fernando Pegoraro.
El funcionario también explicó que “esta herramienta, al abarcar superficies y distancias mucho mayores que un relevamiento terrestre, es indispensable para evaluar, cuantificar y establecer prioridades en las medidas a tomar”.
El drama del plástico en las costas patagónicas
Cada año, toneladas de basura plástica, en su mayoría proveniente de la actividad pesquera, terminan en el mar, afectando directamente a la biodiversidad marina y su hábitat, que quedan expuestos tanto a enredos como a la ingestión de este material altamente contaminante, problema que les genera lesiones y eventualmente la muerte.
Lo cierto es que los ecosistemas marinos de las copsas chubutenses y de toda la región se ven gravemente amenazados por este problema que, pese a los esfuerzos y las acciones de mitigación, siguen amenazados.
“ La conservación de nuestro patrimonio natural y cultural es una tarea continua, pero enfrentamos una problemática compleja y debemos abordarla desde sus causas profundas», analizó la subsecretaria de Conservación y Áreas Protegidas luego de un operativo de limpieza realizado por el Foro de a fines de septiembre en una zona costera de la Península de Valdés.
Y alertó: "Necesitamos marcos legislativos que prevengan la contaminación de nuestros mares y costas desde su origen. Seguiremos respaldando todas las acciones de mitigación, pero la clave está en evitar que el daño ocurra".
En ese sentido, Bravo consideró que "para lograr los objetivos de conservación, es imprescindible una articulación coordinada entre todos los actores: el gobierno, las comunidades y las organizaciones".
"La biodiversidad que protegemos no es solo un patrimonio natural invaluable, sino un recurso esencial para la sostenibilidad y la calidad de vida de nuestras comunidades. Nuestro desafío más urgente es asegurar que estas políticas se implementen y tengan un impacto real, y para ello, debemos reunirnos, debatir y construir un marco normativo sólido que garantice la protección efectiva y permanente de nuestro entorno, reconociendo la complejidad ambiental que enfrentamos", concluyó la funcionaria chubutense.
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