El arquero atajó dos de los cuatro penales que le patearon en la definición, pero además anduvo bárbaro en el partido de vuelta con varias tapadas.
Sergio Romero atajó 12 de los 23 penales que le patearon en Boca. El promedio es una locura, porque además ese número incluye tres series consecutivas de Copa Libertadores definidas desde los doce pasos. Nacional de Uruguay, Racing y ahora Palmeiras padecieron tener del otro lado un arquero fenomenal, que domina todos los registros cuando se dan estos momentos.
Ya en los 90' que se jugaron en el Allianz Parque, Sergio Romero había sido uno de los grandes responsables de que el Xeneize no se quedara afuera. Tapó pelotas muy importantes como la definición de Mayke y el remate desde afuera de Ze Rafael. Después hubo un cabezazo de Rony que el "1" también pudo evitar.
Pero la más notable fue la chilena del mencionado Rony en tiempo adicionado. El 10 de Palmeiras ensayó una pirueta muy buena y agarró la pelota de lleno, de pique al piso. A puro reflejo, Romero la sacó para el costado y en el rebote también le impidió anotar a Endrick, que ensayaba una fantasía pero tampoco pudo con el arquero de Boca.
Después del pitazo final de Matonte, los penales le dieron una nueva oportunidad al arquero que fue mundialista dos veces con la selección. Y como si le faltara algo, Chiquito tapó los remates del mejor pateador del rival, Raphael Veiga, y del referente y capitán, Gustavo Gómez.
“Estoy contento, con 36 años me doy el gusto de disfrutar cuando llegan los penales y, si uno disfruta, se hace todo más simple”, comentó, tras protagonizar una nueva serie de penales, esta vez, dejando afuera a Palmeiras en semifinales.
El arquero subcampeón del mundo con la selección argentina, además, fue clave durante el desarrollo del encuentro, cuando el conjunto local generó numerosas situaciones de gol.
“Sabíamos que el segundo tiempo iba a ser más duro que el primero, la expulsión de Marcos (Rojo) nos complicó y el árbitro nos sacó un cambio, pero por suerte estamos en la final”, se alegró.
“Me toca otra vez en Río, siempre es lindo jugar en el Maracaná”, agregó, en referencia a la final de la Copa Libertadores, que se jugará el cuatro de noviembre en ese estadio, mismo donde Argentina perdió la final del Mundial 2014 ante Alemania, con Romero como titular.
Los penales que atajó Romero para que Boca llegue a la final
Te puede interesar...
Dejá tu comentario