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Ciudad Evita, el barrio pensado por Juan Domingo Perón en honor a su segunda esposa

Ubicada en el partido bonaerense de La Matanza, esta localidad nació como un proyecto de "Ciudad-jardín" bajo el gobierno peronista y las viviendas se terminaron de entregar en dictadura. LMNeuquén entrevistó a dos historiadores, quienes explicaron los pormenores de sus orígenes, diseño y construcción.

Delimitada por la Autopista A002 (Tte. Gral. Pablo Riccheri) y la Ruta provincial 4 (Camino de Cintura), Ciudad Evita es en la actualidad parte del populoso partido bonaerense de La Matanza. Esta localidad, donde viven miles de personas, fue un proyecto de Juan Domingo Perón en homenaje a su segunda esposa, Eva María Duarte.

Con una Europa devastada por Segunda Guerra Mundial y precios agropecuarios en un alto valor, Perón fue elegido Presidente. Y en su primer período buscó concretar algunas de las promesas que había formulado cuando aún estaba al frente de la Secretaría de Trabajo y Previsión.

En ese contexto internacional favorable para la Argentina, Perón buscó llevar adelante un proceso de modernización. Modernización que, fundamentalmente, tuvo dos patas: diversas políticas con el foco puesto en lo social y ambiciosos proyectos de infraestructura.

Para según el caso, algunas personas verían con buenos ojos la concreción de estos proyectos y otras se convertirían en sus más férreas detractoras.

Durante esos primeros años de los gobiernos se aprobó el Estatuto de los trabajadores, se equipararon los derechos entre los hijos matrimoniales y extramatrimoniales, se instauró el voto femenino y se crearon programas de salud pública. En lo que ha obras de infraestructura se refiere se construyeron escuelas y barrios para los trabajadores y las clases más humildes.

Expropiación, planificación e inicio de obras

A través del decreto presidencial 33221/47, Perón expropió unas tierras en un páramo ubicado a 30 kilómetros del Congreso de la Nación –en lo que hoy es el segundo cordón del conurbano bonaerense– para construir miles de viviendas sociales. Estas tierras serían administradas por el Banco Hipotecario Nacional hasta 1963 para luego pasar a formar parte del municipio de La Matanza.

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Esteban Darío Ocampo es historiador, miembro del Instituto de Historia Militar de la República Argentina; del Instituto Sanmartiniano del Perú; y de la Junta de Estudios Históricos de San Juan. Ha escrito diversos libros y artículos históricos de diferentes periodos para Argentina, Chile, Perú y Ecuador. Ante la pregunta de LMNeuquén, el especialista detalló la vinculación de los orígenes de Ciudad Evita con la principal terminal aérea de nuestro país.

“El origen de Ciudad Evita está enmarcado estrechamente con las acciones llevadas a cabo para la construcción del aeropuerto internacional de Ezeiza (inaugurado el 30 de abril de 1949, en la denominada “Operación Territorial Ezeiza”. La planificación de las obras alrededor del aeropuerto incluía lugares de esparcimiento (balnearios, colonias de vacaciones), un plan de forestación del área, la instalación de una Villa Olímpica, la construcción de nuevas vías de comunicación como era la autopista Riccheri, instalaciones asistenciales, educativas y de salud, una zona industrial –que nunca llegó a ejecutarse– y un conjunto de viviendas pensado originalmente para los trabajadores aeroportuarios (Barrio 1). Con esta planificación y posterior ejecución, se construyó un paisaje particular y diferente en el conurbano, donde a su vez garantizaba una reserva verde para la ciudad de Buenos Aires”, explica Ocampo.

Más allá del carácter casi exclusivo que inicialmente se le dio para los aeroportuarios, hubo una ampliación en el espectro de beneficiarios para esas viviendas. “No eran pensadas exclusivamente para los trabajadores del aeropuerto, sino que los destinatarios podían ser colaboradores de la Fundación Eva Perón, trabajadores que se anotaban en los planes de vivienda, e incluso, inmigrantes. De esta forma, Ciudad Evita pasaba a ser la oportunidad para mostrar el modelo social peronista de ‘orden y armonía’”, añade Ocampo.

La muerte de Eva y la entrega de las casas

Pocos meses después de haber protagonizado la primera transmisión de TV en la Argentina y de haber legado el voto a las mujeres en la Argentina, Eva Duarte de Perón falleció, con solo 33 años, a raíz de un cáncer el 26 de julio de 1952. A partir de su muerte, los sentimientos de amor y odio, de admiración y rechazo, se agigantaron según el tamiz con el que se veían las políticas adoptadas y si dichas medidas beneficiaban a las personas o no.

Pablo Adrián Vázquez es licenciado en Ciencia Política y secretario del Instituto Nacional de Investigaciones Históricas Juan Manuel de Rosas. Consultado por LMNeuquén, el especialista también detalló particularidades del proyecto en sus orígenes. “Había una idea de hacer un complejo de "Ciudad-jardín" con viviendas populares, a través del Ministerio de Obras Públicas de la Nación. Desde esa cartera se diseñó la idea del contorno de Evita. Ya desde sus orígenes, existía una fuerte conexión entre el aeropuerto de Ezeiza, el Barrio Justicialista 1 de Ezeiza y Ciudad Evita. Se forjó un núcleo fuerte de presencia peronista, no sólo para los habitantes de esa zona del conurbano, sino para los turistas y visitantes del exterior que arribaran por esa terminal”, remarca Vázquez.

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Cinco mil viviendas, un tercio de las 15.000 proyectadas originalmente, se terminaron de construir entre el final de la primera presidencia de Perón y el comienzo de la segunda. Pero las casas se fueron entregando entre 1953 y 1957. “Se trataba de chalets californianos inspirados en el urbanismo de Edward Howard. La idea era replicar el modelo de viviendas pensado por ese inglés radicado en los Estados Unidos, un modelo como el que se veía en Hollywood, como una forma de ascenso social y buena vida”, añade Vázquez.

Con el contorno de Eva, ¿mito o realidad?

La idea de que Ciudad Evita ha sido construida a imagen y semejanza al rostro de la ex Primera Dama ha cobrado fuerza a lo largo de los años. Muchos sostienen que la forma de la localidad matancera contempla la cara de Eva Duarte, su tradicional rodete, el hombro y un brazo en alto. Sin embargo, hay muchas versiones que intentan explicar la similitud del diseño urbanístico con la recordada imagen de la segunda esposa de Perón.

“En relación al ‘contorno o figura de Eva Perón’ que se observa en Ciudad Evita, el mismo ha dado lugar a mitos y aclaraciones. Partiendo desde el punto que en los planos no se detalla el motivo de la organización y planificación del espacio de esta forma, todo lo que se ha desarrollado hasta el presente son especulaciones, porque incluso nada se menciona sobre ello en el momento. Primeramente, se ha dicho que el contorno fue pensado por el entonces ministro de Obras Públicas Juan Pistarini a modo de homenaje a la Primera Dama. Sin embargo, y dada la mala relación que existía entre ambos, así como con su esposa quién de alguna manera “rivalizaba” en cuanto a su presentación en el trabajo social, esa versión queda descartada”, sentencia Ocampo.

“Otras fuentes señalan que (el contorno) fue pensado dentro del programa de propaganda peronista, que aprovechaba este diseño de la Ciudad con la forma de la cara de Eva Duarte, para mostrar al ‘modelo peronista’ con la posibilidad abierta a todos de viajar en medios como el avión, ‘viendo a Evita saludar a sus seguidores desde tierra’”. En contraposición, también se señala que la versión del contorno surge desde los llamados ‘antiperonistas’ quienes buscaron de esta manera señalar el nivel de personalismo e idolatría desmedidos en los gobiernos de Juan Domingo Perón”, comparte Ocampo.

El historiador también incluye en su enumeración a las particularidades topográficas de esa zona de la provincia de Buenos Aires. “Según otros autores, el diseño correspondería a un ‘capricho’ de la geografía del lugar, ya que en imágenes aéreas de la década de 1920 y 1930, puede observarse el contorno señalado, por las lomas y formas propias del terreno”.

Golpes de Estado y cambios de nombre

En septiembre de 1955 la autodenominada Revolución Libertadora derrocó a Juan Domingo Perón y obligó a exiliarse durante 17 años en distintos países. Con esta dictadura cívico-militar en el poder, la denominación de este barrio popular sufrió diversos cambios.

Bajo el “espíritu libertador” de esa dictadura una de las primeras medidas que se tomaron fue la prohibición de nombrar al exiliado Perón y a su fallecida segunda esposa. En este sentido, y como había ocurrido antes, el gobierno militar también buscó eliminar todo vestigio que rememorara al presidente constitucional derrocado. “Como había sucedido con el llamado Barrio Juan Domingo Perón, que renombraron como Barrio Parque Cornelio Saavedra; a Ciudad Evita le cambiaron el nombre por el de Ciudad General Belgrano”, detalla Ocampo.

El levantamiento de la proscripción y la dimisión de Héctor J. Cámpora le permitieron acceder a Perón a su tercera y breve presidencia. En ese período se restableció el nombre de Ciudad Evita.

Con el Proceso de Reorganización Nacional, que derrocó el débil gobierno de María Estela Martínez de Perón, la dictadura cívico-militar volvió a cambiarle el nombre por el de Ciudad General Martín Miguel de Güemes. Esta denominación era un tributo a la Gendarmería Nacional Argentina (GNA).

De la mano de Raúl Alfonsín, con el retorno de la Democracia, todo volvió a su lugar. Hacia el año 1984 la localidad recuperó su nombre original: Ciudad Evita.

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