Le arruinó la Libertadores a Boca y desde entonces fue de mal en peor: la maldición de Kennedy

John Kennedy, el delantero de Fluminense que hace exactamente un año se convirtió en héroe al anotar el gol decisivo en la final de la Copa Libertadores 2023 frente a Boca, vive hoy un presente alejado de los momentos de gloria. Aquella noche en el Maracaná, donde el futbolista brasileño hizo historia al darle a su equipo el primer título continental de su historia, parece un recuerdo lejano, ya que actualmente Kennedy se enfrenta a un momento de baja participación, sanciones disciplinarias y desencuentros con el club carioca.

La historia de Kennedy con el Fluminense, que alguna vez parecía prometedora, comenzó a complicarse con episodios fuera de las canchas. Tras su épico gol ante Boca, su nivel en el campo de juego comenzó a decaer y, aunque era un jugador clave en los planes del equipo, los goles fueron escaseando: desde aquella noche del 4 de noviembre de 2023, el delantero solo ha marcado seis veces en todas las competencias, y su última anotación data de mayo.

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John Kennedy, el delantero que le arruinó la LIbertadores a Boca

El mal momento de John Kennedy, de héroe frente a Boca a casi borrado

En el Brasileirao, Kennedy acumula apenas 646 minutos de juego, y en los últimos 21 partidos ha sido suplente o ni siquiera convocado. La pérdida de protagonismo, sin embargo, no responde únicamente a cuestiones futbolísticas.

En mayo de este año, Kennedy protagonizó un incidente que impactó su relación con el club. Junto con otros tres compañeros de equipo, organizó una fiesta con mujeres en la concentración del equipo, poco antes de un partido crucial contra Vasco da Gama. La fiesta desencadenó una serie de sanciones por parte de Fluminense, y mientras los otros involucrados, Alexsander, Kauã Elias y Arthur, fueron reincorporados al equipo después de disculparse, Kennedy continuó con actitudes que llevaron al club a tomar medidas más drásticas.

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John Kennedy

Sanciones, fiestas e inactividad

A pesar de que expresó públicamente sus disculpas y negó haber participado en la fiesta, Kennedy volvió a infringir las normas al llegar tarde a un entrenamiento, lo que provocó su marginación indefinida del equipo.

Las sanciones no han sido el único cambio en la carrera de Kennedy este año. Fluminense también decidió ponerle precio en el mercado de transferencias a mitad de año, fijando su valor en siete millones de dólares, pero ningún club presentó una oferta por el delantero, lo que dejó a Kennedy en una posición incierta dentro del equipo.

Por otro lado, el cambio de entrenador en el club, con la salida de Fernando Diniz y la llegada de Mano Menezes, también afectó su situación. Diniz había sido uno de sus grandes apoyos, incluso anticipándole que sería él quien anotaría el gol del título contra Boca. Sin embargo, con Menezes al mando, Kennedy no ha logrado recuperar su posición en el equipo y cada vez se ve más lejos de recuperar el lugar que alguna vez tuvo en el conjunto carioca.