Patronato, la victoria histórica en Colombia y una fortuna para sus arcas

En otro hecho que solamente se da en el fútbol de Sudamérica y con equipos argentinos, Patronato logró una victoria histórica sobre Atlético Nacional y el miércoles por la noche se ganó el derecho a seguir en competencias internacionales, pese a estar en la segunda categoría del fútbol de su país.

Luego de haber ganado la Copa Argentina 2022 y así se clasificó a la Copa Libertadores, pero descendió por las malas campañas anteriores que le dejaron un promedio muy bajo. Con un plantel armado para la Primera Nacional, que en ese torneo deambula en la mitad de la tabla, ganó dos partidos en la fase de grupos del certamen continental y el último tuvo sabor a hazaña, ya que determinó el ingreso a la Copa Sudamericana.

Fue 1 a 0 en Medellín con un cabezazo del marcador central Cristian González cerca del final para el conjunto que dirige desde hace poco Rodolfo De Paoli, quien asumió en lugar de Walter Otta justamente por el flojo comienzo de temporada en la B. La atajada del arquero Julio César Salvá en la última acción del partido, en tiempo adicionado, fue esencial y potenció el carácter de hazaña por la forma de la victoria.

Patronato le había ganado en casa por 4 a 1 a Melgar y sumó 6 puntos en la fase de grupos, con lo cual dejó último al conjunto peruano y quedó tercero en el grupo H. Eso le genera al club entrerriano una ganancia importante en términos económicos, tanto por la victoria como por el acceso a los 16avos de la Copa Sudamericana.

El equipo argentino había obtenido 3 millones de dólares por jugar fase de grupos, además sumó 600 mil dólares por las victorias en la Libertadores y 500 mil por acceder a la Sudamericana. La suma de 4.100.000 dólares es muy significativa para el contexto que atraviesa Patronato, ya que es mayor al presupuesto de 31 de los 37 equipos que hoy tiene la Primera Nacional, la categoría en la que hoy compite.

Entre lo importante del logro deportivo del conjunto de De Paoli y el tipo de cambio que rige en Argentina, el impacto anímico y económico es enorme para los vestidos de negro y rojo.

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