Sorpresa: cómo fue la despedida de los hinchas de San Lorenzo a Russo tras la caída ante Platense

La eliminación de San Lorenzo como local a manos de Platense, que le impidió al Ciclón avanzar a la instancia decisiva del Torneo Apertura, no modificó el cariño de los hinchas hacia Miguel Ángel Russo. En medio de los rumores sobre su arribo a Boca, el DT fue recibido con aplausos y una ovación en Boedo, acaso sabiendo que se trataba de una agridulce despedida: el entrenador estuvo por encima del espantoso momento político e institucional del club.

Los buenos resultados de Russo al frente del Ciclón

Pese a los escándalos en los que se vio envuelto el presidente Marcelo Moretti, y los reclamos por los pagos de sueldos adeudados, el estratega aisló al plantel y conformó un grupo unido, con Iker Muniain como capitán y bandera. Aquello llevó al Cuervo a ser uno de los elencos mejor colocados durante la fase regular de la competición, estar en puestos de acceso a copas internacionales e integrar el top 4 del certamen doméstico.

Por ello, los fanáticos le reconocieron su tarea encomiable. Miguelo había llegado a Boedo después de un flojo cierre de ciclo en Rosario Central, que empañó una etapa repleta de éxitos y títulos. Al instante, y a diferencia de lo que había ocurrido durante su primera campaña al borde de la línea de cal con CASLA, los seguidores del equipo porteño lo integraron como propio y tomaron como un baldazo de agua fría las versiones vinculadas al contacto con Juan Román Riquelme.

De hecho, todo parece indicar que el orientador encabezará el cuerpo técnico del Xeneize en las próximas horas, una vez que termine de resolver su salida de la institución que lo cobijó desde octubre del año pasado. Por lo pronto, se supo que el ex Racing y Cerro Porteño estuvo charlando con el Consejo de Fútbol del conjunto azul y oro con respecto a los eventuales refuerzos pensando en el incipiente Mundial de Clubes, que empezará en junio.

Aplausos y ovación ante el último partido de Miguelo con el Cuervo

Al momento de conocerse las formaciones, y cuando la voz del estadio mencionó a Russo, hubo una reacción unánime que bajó desde las tribunas: las palmas fueron atronadoras y el apoyo se sostuvo pese al resultado adverso. Curiosamente, los seguidores cuervos estuvieron lejos de reprender a los futbolistas y a su conductor cuando se consumó la caída, esa que le impidió soñar con sumar un nuevo trofeo en sus vitrinas. Ahora, tendrá una tarea imposible: en una coyuntura convulsionada, buscar al reemplazante de uno de los DTs más laureados del país.