Una jugada que recorre el mundo y de la que habla toda España se dio este domingo en un partido que definía muchas cosas y tuvo al zapalino Acuña de titular. ¡Escándalo!
Insólito. De locos. Increíble. Las cosas que pueden verse solo en la "era VAR". Lo cierto es que en la igualdad entre Real Madrid y Sevilla (2-2) en el estadio Alfredo Di Stéfano se generó una gran polémica de la que habla toda España, en una jugada que recorre el mundo.
La situación inédita surgió cuando el árbitro Juan Martínez Munuera cobró un penal a favor del local, por una falta de Bono sobre Karim Benzema, lo llamaron desde el VAR y dio marcha atrás en su decisión, que terminó favoreciéndo a la visita con la pena máxima.
Sí, es que en la jugada previa, la que desencadenó en la contra del equipo de Zinedine Zidane, el defensor Eder Militão tocó la pelota con su brazo derecho y evitó una amenaza que se originó desde un córner para Sevilla, que tuvo al neuquino Marcos Acuña y a los también argentinos Alejandro Gómez, Lucas Ocampos y Franco Vázquez, los tres primeros titulares.
En ese momento, Ivan Rakitic, ex Barcelona, se hizo cargo de la pelota y convirtió el 2-1 transitorio, ya que en tiempo agregado Diego Carlos selló el resultado definitivo, con un gol en contra.
Con este resultado, Real Madrid sumó 75 puntos, los mismos que Barcelona, y desperdició la chance de alcanzar a Atlético Madrid, el líder, a falta de tres fechas para la finalización de la liga española.
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