Los cortes llegaron con una rebaja de hasta el 30% y los vecinos respondieron con un fuerte interés. Carniceros esperan nuevos cargamentos en los próximos días.
Después de años de restricciones, Neuquén volvió a recibir carne con hueso y los primeros cortes ya están a la venta en algunas carnicerías de la ciudad. La llegada de los productos generó un notable interés entre los vecinos, quienes no dudaron en acercarse a los comercios para conocer los precios y realizar sus compras, en especial de costilla y asado, dos de los cortes más buscados para las reuniones familiares y encuentros al aire libre.
La primera tanda de carne ingresó hace pocos días y, aunque fue en cantidades limitadas, los carniceros coinciden en que la recepción por parte de los neuquinos fue muy positiva. En algunos locales la carne se agotó en pocas horas y se espera que en los próximos días lleguen nuevos cargamentos con mayor volumen para satisfacer la demanda creciente.
Desde Carnes Argentinas, una de las carnicerías que recibió carne con hueso, confirmaron que lograron ingresar 50 cajas de carne provenientes de la provincia de La Pampa. Cada caja contenía unos 9 kilos de carne, entre costillares y cortes del centro. Los precios, si bien no fueron extremadamente bajos, marcaron una diferencia en comparación con los valores habituales que los neuquinos venían pagando por cortes sin hueso o por opciones importadas.
“El costillar se vendió a 12 mil pesos el kilo de las partes de los laterales, mientras que la parte del centro, que tiene un poco más de carne, a 13 mil pesos”, explicaron los trabajadores del comercio a LMNeuquén.
Además, destacaron que esta primera partida fue algo así como una prueba piloto, destinada a medir el interés de los clientes y a organizar los futuros envíos. “Se vendió muy bien, mucha gente vino a preguntar y a comprar. Estamos esperando que en los próximos días nos llegue un nuevo cargamento, seguramente con más kilos”, aseguraron.
Los carniceros aclararon además un punto que generó confusión en algunos sectores: “Esta carne no es brasileña, como algunos dicen. Es carne de La Pampa, carne argentina, de muy buena calidad y que nos permite ofrecer precios más accesibles”.
Según detallaron, los cortes ingresaron con un precio aproximado un 30% más barato que los valores que venían manejando hasta ahora. Esta reducción, aunque no es sustancial en todos los casos, resulta un alivio para los bolsillos en medio de una economía golpeada por la inflación y los constantes aumentos en productos básicos.
Carnicerías de barrio también se suman y bajan precios en algunos cortes tradicionales
No solo los comercios más grandes recibieron carne con hueso: en las carnicerías de barrio también comenzó a notarse el cambio. En una carnicería ubicada en un sector residencial de la ciudad, los carniceros confirmaron que pudieron ofrecer asado con hueso a un precio de $17.990 el kilo, una baja de aproximadamente un 5% en comparación con semanas anteriores.
La diferencia, en este caso, radica en el origen del producto. “Esta carne viene de Luis Beltrán, en Río Negro. Es muy buena carne, y la gente la pide mucho. Nos han hecho varios encargos”, contaron desde el comercio, donde aseguraron que los clientes valoran no solo el precio, sino también la posibilidad de volver a consumir carne nacional con hueso, un producto que había quedado relegado en los últimos tiempos.
El entusiasmo por el regreso de este tipo de carne no se limita solo a los precios. Muchos clientes valoran especialmente la calidad y el sabor, que difieren notablemente de las alternativas sin hueso o congeladas que dominaron el mercado neuquino durante los últimos años. “El asado con hueso tiene otro sabor, la gente lo sabe y lo busca”, apuntaron los carniceros.
Además, la posibilidad de conseguir cortes tradicionales para parrilla ha reactivado la costumbre de los encuentros al aire libre, tan arraigada en la cultura local. Algunos carniceros afirmaron que los pedidos para reuniones familiares aumentaron desde que los nuevos cortes están disponibles.
La carne con hueso volvió a Neuquén: precios, calidad y expectativas para los próximos días
El retorno de la carne con hueso no solo marca un alivio en los precios, sino que también representa un paso importante para el comercio local, que ve con buenos ojos la posibilidad de diversificar su oferta y atraer a nuevos clientes.
Si bien los valores aún están lejos de ser bajos, el simple hecho de que haya una diferencia de entre un 5% y un 30% en algunos cortes ya genera un impacto favorable, en un contexto donde cada ahorro cuenta. Desde las carnicerías señalaron que el flujo de consultas y compras creció notablemente desde la llegada de los primeros cargamentos.
En las próximas semanas, se espera que el abastecimiento mejore, tanto en cantidad como en frecuencia. Algunos distribuidores ya adelantaron a los comerciantes que las siguientes entregas incluirán mayores volúmenes, lo que podría permitir, eventualmente, una baja más significativa en los precios o, al menos, una mayor estabilidad.
Además, se aclaró que toda la carne que está ingresando proviene de provincias argentinas, como La Pampa o Río Negro, desmintiendo los rumores sobre supuestas importaciones brasileñas. Esta afirmación fue importante para muchos clientes que valoran la producción nacional y la calidad de la carne del país.
Mientras tanto, los vecinos celebran la posibilidad de volver a disfrutar de un costillar o un asado con hueso, con la esperanza de que los precios sigan bajando y la oferta se consolide en los próximos meses.
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