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Descubre el mágico mundo de los títeres para adultos

La Tramoya la compañía titiritera neuquina que desafía al espectador en cada encuentro.

Los títeres para adultos no son lo que uno piensa. Suena a películas para adultos, prohibidas para menores, pero desde sus orígenes, los el teatro de títeres fue el género, por popular e itinerante, más accesible a todos los públicos.

“La característica distintiva del teatro de títeres para adultos es precisamente su público", dijo Gabriela Mendes, integrante de la compañía La Tramoya. "No creemos que haya temas tabúes, ni para los adultos, ni para las infancias, el tema es el tratamiento, cómo se los aborda y sobre todo nunca perder la dimensión estética", agregó.

La Tramoya se formó en el año 2009, sus integrantes: Gabriela Mendes, Gladis Cáceres y Diego Genaro, tiene dos oficios principales: el de titiriteros, desde hace 15 años, y desde mucho antes en la docencia.

“Está claro que el nivel de silencios, connotaciones, guiños o diálogos establecidos no son los mismos para adultos que para las infancias, pero siempre apostamos a un público capaz de interpretar lo dicho y lo sugerido. Tenemos plena confianza en el público, estimando que va a poder abordar las obras desde sus representaciones del mundo, sus marcos conceptuales, ideológicos, que va a poder establecer un diálogo", señaló.

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Títeres para adultos, una opción en Neuquén.

Títeres para adultos, una opción en Neuquén.

Mendes dijo que desconfían de aquellas obras, cualesquiera sean, no sólo de títeres, que le dan todo ‘masticado’ al espectador. "Creemos que hay que apostar a esos espacios vacíos, a esos silencios que obligan al espectador a meterse dentro de la obra a, como diría la teoría de la recepción, completarla”, añadió.

Cómo se formó la compañía de títeres

Luego de cursar tres años en la Escuela Provincial de Títeres de Neuquén, los integrantes de La Tramoya decidieron conformarse como grupo para seguir experimentando con el lenguaje de este arte. “Si bien veníamos, desde nuestro lugar de docentes, trabajando y militando en las escuelas, a partir de aquella experiencia, ya nos metimos de lleno a producir en otro plano, en este caso obras para que, sobre todo, circulen en aquellos lugares donde es más difícil que esto ocurra, o sea los barrios más pobres de la ciudad, de la provincia", dijo Mendes.

"Quienes nos acompañaron en este recorrido fueron nuestros profesores, todo ellos reconocido titiriteros de Neuquén, como Dardo Sánchez y Silvina Vega integrantes del grupo Atacados por el Arte, pero también otras personas con las que fuimos aprendiendo. Este oficio es trotamundos y se aprende mucho de la experiencia acumulada y generosamente compartida", agregó.

La artista mencionó a Los Chon Chon, los encuentros anuales en Juglares en Córdoba, Javier Villafañe, los mellizos Di Mauro y Roberto Espina, como los principales referentes del oficio.

La compañía “La Tramoya” viene realizando tres obras en la técnica títeres de mesa: Rojo, una propuesta para todo público, que es una adaptación propia de un cuento homónimo de Liliana Bodoc; Perseo, una puesta para adultos, basada en una tragedia de un mito griego; y El crimen de un clásico, que es una historia creada a partir de jugar con la posibilidad de que Caperucita Roja y el Lobo, ella como una femme fatale y el animal un gánster de la época.

La historia del teatro de títeres

Desde las grandes cortes medievales europeas a los regímenes totalitarios latinoamericanos, el teatro de títeres, apelando a la metáfora desde la estructura dramática y del metamensaje en la voz y la impostura de sus personajes, se constituyó históricamente como espacio para responder a la injusticia social y a los abusos del poder.

“Como toda actividad artística, construida desde criterios estéticos, el teatro de títeres para adultos, es un espacio de denuncia, reflexión y encuentro. Precisamente, por eso nos conformamos como colectivo de titiriteros y titiriteras, en este contexto en particular, por la necesidad de generar pequeños espacios de resistencia frente a la destrucción de toda política pública, de toda política cultural, como es lo que está aconteciendo con el actual gobierno", dijo Mendes.

"Por eso nos nucleamos tratando de romper el aislamiento en el que nos instala esta época de individualismo exacerbado y con la perspectiva de generar o abrir o instalar el teatro de títeres para adultos. Recordemos que cada vez que se dice títeres, se lo circunscribe al mundo de las infancias y casi exclusivamente a la técnica de guante, por ser la más difundida”, agregó.

Las propuestas son convocantes y la oferta variada, La Tramoya pone en escena una y otra vez obras que generan en el espectador una empatía inmediata y hasta una instancia de diálogo permanente.

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La Tramoya.

La Tramoya.

“Este ciclo, que creamos en el Teatro El Arrimadero, llamado Simulacros de Luna, busca precisamente esto, abrir camino y la verdad que nos está yendo muy bien. Hasta ahora hemos realizado tres funciones, con distintas compañías y variación de técnicas y todas estuvieron llenas", contó la artista.

"Se ve que había una necesidad de encuentro, porque el clima que se crea es muy festivo, hay un ida y vuelta con el público que es maravilloso. Lo podemos percibir en la cara de felicidad con la que se va la gente, en las devoluciones que nos realizan, en ese momento único e irrepetible de encuentro a través del arte, donde se suspenden las reglas cotidianas del mundo para ingresar, por un rato, a esos mundos mágicos, ficcionales que nos instalan más allá de la realidad o en la misma realidad, pero desde otro lugar", concluyó.

A partir de este año LA TRAMOYA forma parte del Colectivo de Titiriteras y Titiriteros Neuquinos, en la que participan distintos elencos integrados por Julieta Tabbush de Cineamano; Fernando Ávila, de Teatro de Tersites; Claudia Miranda y Natalia Verussa de Títeres Casiopea; Flavio González, de Pim Pam Pom; Daniel Aguirre, de La Pelela Títeres y Adriana Iglesias, actriz y realizadora plástica”

Actualmente, se encuentra en cartelera el Ciclo de Títeres y Objetos “Simulacros de Luna” para público adulto el segundo domingo de cada mes en el teatro Arrimadero de Neuquén. Y se va replicando en bibliotecas populares de a poco, con intenciones de poder llevarlo al interior de la provincia en algún momento.

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