“No los vas a ver más”, le dijo a la mamá antes de irse con los nenes, de 4 y 10 años, que vieron todo. Lo detuvieron cerca del límite con Río Negro.
A un hombre acaban de dictarle prisión preventiva como responsable de un terrible episodio de violencia de género en Gaiman, Chubut, durante el que le dio una salvaje paliza a su pareja y se llevó a sus hijos de la casa en medio de amenazas.
“No los vas a ver más”, le advirtió a la mujer luego de la golpiza y antes de subirse al auto y salir a la ruta con destino a Río Negro, donde pretendía instalarse con los chicos, de apenas 4 y 10 años, y que debieron presenciar toda la escena.
Luego de la desesperada denuncia de la madre, en un puesto de control de Arroyo Verde, un paraje cercano al límite entre las dos provincias, la policía interrumpió el viaje del violento padre, luego de los informaran de la situación desde la comisaría de la tradicional localidad galesa, cercana a Puerto Madryn.
El hecho ocurrió en la madrugada del sábado 31 de agosto, cuando el agresor, identificado con las iniciales AJD, en estado de ebriedad, atacó a la mujer y posteriormente intentó huir con los menores.
Brutal paliza en Chubut
Según relató con detalle el fiscal en la audiencia en la que el último sábado se definió la preventiva para el imputado, la brutal paliza se produjo alrededor de las 5 de la mañana en una chacra en la que el imputado convivía con su pareja y sus dos pequeños hijos, de apenas cuatro y diez años, y quienes presenciaron la violenta situación.
El acusado había pasado la noche afuera, tras salir con un amigo, y cuando regresó a la casa visiblemente pasado de alcohol, despertó a su pareja y le exigió que le diera el teléfono.
Después de revisar el aparato, empezó a gritarle e insultarla, para posteriormente pasar directamente a la agresión física.
Adelante de sus hijos, le sujetó los brazos, le pegó varias bofetadas con la mano abierta en la cara y después la tiró al piso, donde empezó a darle patadas en distintas partes del cuerpo.
Cuando dio por finalizada la golpiza, tomó a los dos menores que lo miraban asustados y los subió a su camioneta, mientras seguía gritándole a la desesperada mamá: "No los vas a ver más", le dijo después de informarle su plan de llevárselos a vivir con él en una casa en la provincia vecina.
Según se explicó desde el Ministerio Público Fiscal, el hombre no es de Chubut y no tiene arraigo en la provincia, aunque estaba viviendo en Gaiman con su mujer y los chicos.
Una vez que se fue con los nenes, la mujer logró reponerse mínimamente de los golpes para alertar a la policía, desde donde coordinaron un operativo policial para detener al hombre, algo que finalmente se produjo antes de que pudiera dejar la provincia, gracias a la rápida respuesta.
La decisión de la jueza
Luego del episodio, la fiscalía presentó una acusación contra el imputado por los delitos de lesiones leves agravadas por el vínculo y mediando violencia de género, amenazas simples, y sustracción de menores en grado de tentativa, todo ello en concurso real y bajo el marco de la Ley 26.485 de Protección Integral a las Mujeres.
El Ministerio Público además puso énfasis en el hecho que la víctima del ataque presentó lesiones físicas que fueron constatadas y que según los indicios, se corresponden con la agresión denunciada.
También fundamentó la solicitud de prisión preventiva basándose en los riesgos procesales de fuga y entorpecimiento de la causa.
La jueza Mirta Moreno concedió el pedido y fijó la prisión preventiva por un plazo mínimo de dos meses. Para que avalara los argumentos del fiscal, pesó también un antecedente anterior al violento episodio del 31 de agosto, que hasta ahora no había sido denunciado.
Según se explicó, en una ocasión anterior, el hombre había amenazado a la mujer con un cuchillo y se había llevado a uno de sus hijos a Buenos Aires sin su consentimiento, aunque este hecho no había sido denunciado en su momento.
Moreno también consideró fundamental la medida para proteger a la víctima, quien actualmente recibe asistencia de profesionales del Servicio de Asistencia a la Víctima del Delito (SAVD).
Según explicó la jueza, es necesario garantizar que la mujer tenga el apoyo necesario para afrontar el proceso judicial y relatar su versión de los hechos con libertad y segura. Si el presunto agresor estuviera libre, esto se podría ver amenazado.
La defensa había pedido una morigeración de la medida con un arresto domiciliario en Río Negro para el imputado, bajo tratamiento psicológico vinculado a la violencia de género. Sin embargo, este pedido fue rechazado por la procuradora de fiscalía Guadalupe Serafini y por la propia magistrada.
Además de la prisión preventiva, se ordenó la exclusión del hogar de A.J.D., en conformidad con la decisión de la Jueza de Paz, tras constatarse la falta de arraigo del acusado.
El caso continúa bajo investigación, mientras que la Asesoría de Familia está brindando atención y seguimiento tanto a la víctima como a los menores involucrados.
Te puede interesar...
Lo más leído
Dejá tu comentario