Algunos sectores y actividades muestran recuperación, pero la comparación con el año pasado hace que aparezcan números negativos.
Aunque algunos indicadores de actividad muestran sectores que empiezan a recuperarse, en el mercado se espera que el cierre del año arroje resultados negativos debido a la base de comparación de estadísticas, considerando lo que ocurrió durante el tramo final del Gobierno anterior.
El año pasado, a esta altura, el entonces ministro de Economía, Sergio Massa, quien a la vez era candidato presidencial, había disparado una serie de medidas para “poner plata en el bolsillo” de la clase media, como fue la derogación del Impuesto a las Ganancias.
Ese tipo de medidas evitaron que la actividad del año pasado se desplomara. La actividad de las industrias siguió adelante con niveles de ocupación de capacidad instalada arriba del 60%. Este año las pymes están al 50%.
Según datos del Centro de Estudios Orlando Ferreres, el nivel general de actividad registró una caída de 3% interanual en julio de 2024, acumulando para los primeros siete meses del año una contracción de 4,9%.
Cómo se mueve la economía por sectores
Por su parte, la medición desestacionalizada registró una mejora de 0,8% respecto al mes precedente. “A pesar de una corrección a la baja que sufrió el sexto mes del año, el nivel actual de la serie desestacionalizada se ubica 2% por encima del piso tocado en marzo”, dice el estudio.
El reporte señala que “por primera vez en el año nuestro indicador contabiliza más sectores al alza que a la baja en la comparación anual, aunque la incidencia de los sectores contractivos lleva al agregado a mostrar aún cifras negativas”.
“Hacia adelante cabe esperar que se mantenga la tendencia de la actividad a recuperar algo de terreno, con la velocidad de la recuperación dependiendo de la mejora que se vea en los ingresos de las familias y en la recomposición del consumo”, advierte el centro de estudios referente del mercado.
La construcción para abajo
Una de las actividades que ayuda a la recuperación, debido a su factor multiplicador, es la construcción, que no atraviesa el mejor momento.
Según registros del Instituto de Estadísticas y Registros de la Industria de la Construcción (IERIC) en julio hubo una caída interanual del 10,1% en la cantidad de empresas.
“El número de empresas activas sigue en su nivel más bajo desde el año 2006, con excepción de los registros correspondientes al año de la pandemia del COVID-19 (2020)”, dice el resporte.
El instituto que depende de la Cámara Argentina de la Construcción (CAMARCO) señala que “las Grandes jurisdicciones tuvieron un comportamiento levemente menos desfavorable, evidenciando un descenso del 9,2%, mientras que el de las Restantes jurisdicciones fue del 11,7%”.
“Una sola jurisdicción es la que sigue escapando a la tendencia contractiva: la provincia de San Juan (+4,9%). Del otro lado, las dos provincias que más retrocedieron son Tierra del Fuego y La Rioja, cuyas tasas de contracción fueron superiores al 25%”, dice el trabajo.
Entre las Grandes jurisdicciones, la que más contrajo su plantel de empleadores fue nuevamente la provincia de Buenos Aires, que tuvo una merma del 11,7% interanual (equivalente a 623 empresas menos).
El análisis por Tipo de Actividad mostró también un comportamiento divergente: mientras que el número de Constructoras/Contratistas se redujo 0,3 puntos que en junio (del -10,3% al -10%), el de Subcontratistas se elevó 1,4 puntos (de -9,8% a -11,2%).
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