Perpetua al femicida de Carina Barros, la adolescente de 15 años asesinada en Buta Ranquil
Al joven de hoy 20 años se le impuso la única pena prevista por el femicidio de la adolescente, cometido en octubre de 2023.
Maicol E. Tapia, el femicida de la adolescente Carina Barros (15), fue sentenciado a cumplir una prisión perpetua a poco de cumplirse un año desde el femicidio. Qué dijeron los jueces.
Cabe recordar que 10 días atrás, Maicol Tapia asumió la responsabilidad del femicidio para no ir a juicio y enfrentarse a toda la prueba que de todos modos ya lo acorralaba. De esa manera, fue condenado mediante un acuerdo de partes.
Sin embargo, su colaboración al asumir el hecho no lo exime de la única pena posible a la que se enfrenta por el delito: la de prisión perpetua -prevista en 35 años en el sistema argentino-, que se le impuso esta semana.
Ello se concretó el día jueves, durante una audiencia en la que la fiscal del caso Natalia Rivera remarcó que “la única pena prevista para este hecho es la prisión perpetua; no hay otra pena para discutir”. El planteo fue respaldado por la abogada querellante que intervino en representación de la familia de la víctima.
El tribunal, integrado por la jueza Leticia Lorenzo y los jueces Eduardo Egea y Diego Chavarría Ruíz, impuso la pena de prisión perpetua y estableció que sea revisada dentro de 20 años para evaluar el proceso de resocialización de la persona condenada. “Esto no significa reducir o cambiar la pena, sino revisarla a los efectos de finalidad de la pena”, indicó el tribunal.
Tapia fue condenado por el delito de femicidio triplemente calificado, por el vínculo, por mediar violencia de género y por alevosía, en carácter de autor.
El femicidio
El femicidio fue cometido el 26 de octubre de 2023 en Buta Ranquil. El acusado, Maicol Tapia, le provocó lesiones a Carina Barros con un cuchillo, entre las 2 y 3:30 de la madrugada. Lo hizo luego de ingresar al domicilio de la víctima, mientras ella estaba sola ya que su hermano y su padre habían salido a extinguir un incendio que se originó en una chacra cercana de sus familiares y que él mismo habría iniciado como factor de distracción para cometer el femicidio de la adolescente.
Es que el hermano de la víctima fue advertido del incendio por el acusado, quien lo llamó por teléfono previamente y le dijo que fuera hacia la casa de su abuelo “porque se estaban quemando los tamariscos”.
El acusado aprovechó esta situación para meterse en la vivienda y dirigirse hacia la habitación de la víctima. Allí, le rompió el celular y comenzó a agredirla. Ella corrió hacia la habitación de su hermano que está en la parte exterior de la vivienda y, en ese momento, el femicida la atacó con el cuchillo, provocándole lesiones que le causaron la muerte.
Tapia y Barros Méndez habían tenido una relación de noviazgo durante alrededor de tres años, que estuvo signada por la violencia de género.
El hecho ocurrido el año pasado en Buta Ranquil causó una gran conmoción. La víctima tenía solo 15 años y su victimario, 19.
En aquel momento, un familiar de Carina, Héctor Medel Méndez confesó a este diario que “estamos destrozados, conmovidos, con un dolor muy profundo. No se dan una idea la tristeza que tenemos todos como pueblo”. Después, agregó: “Nunca había pasado algo así, este es un pueblo chico, con una idiosincrasia propia, donde estamos muy unidos por la cultura, la historia y la religión. Acá somos solidarios, nos saludamos todos los días, compartimos mate con los vecinos, nos visitamos, y los niños juegan en la calle. Por eso, que hayan asesinado a Carina con tanto odio y crueldad, nos afecta muchísimo. Estamos muy mal”.
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