Silvia Cabañares había denunciado una violación meses antes de su femicidio

Silvia Cabañares, la mujer encontrada asesinada en Balsa Las Perlas tres semanas atrás, había denunciado en la Fiscalía neuquina a cinco hombres por haberla violado. Los detalles podrían resultar cruciales para la investigación de su femicidio.

Cabe recordar que el cuerpo de la mujer de 30 años fue encontrado el sábado 26 de agosto por la tarde por una familia oriunda de Neuquén, que se encontraba rondando en la zona de un basural clandestino. Puntualmente, el cuerpo se encontraba a unos 400 metros de la Ruta 74.

De inmediato, la investigación se encausó como un presunto femicidio; se ordenó la autopsia en la que se descubrió una herida mortal de arma blanca, se identificó a la víctima como Cabañares -oriunda de Neuquén-, se entrevistó a su familia y se inició un intento por reconstruir quién la asesinó y luego descartó su cuerpo.

Un primer sospechoso fue demorado en Cipolletti pero liberado posteriormente, tras tomarle muestras genéticas para ser cotejadas con restos biológicos hallados en el cuerpo de la víctima y en el lugar donde éste fue encontrado.

No obstante, la información que pudo conocer LMNeuquén en las últimas horas involucra a la Justicia neuquina, ya que meses antes de su femicidio, en mayo pasado, Silvia había radicado una denuncia en la fiscalía de este lado del puente, señalando a cinco hombres de su entorno por haberla abusado sexualmente.

La fiscalía dio curso inmediato a la causa, pero al ser entrevistada por un profesional, se estableció que la mujer estaba en un contexto de extrema vulnerabilidad y que no estaba en condiciones de declarar como cualquier víctima mayor de edad, sino que debía hacerlo en Cámara Gesell, una pericia reservada para niños, adolescentes y otras personas vulnerables.

Lamentablemente, el turno para atravesar esta instancia se fijó recién para octubre de este año. Un mes y medio antes del turno, el cuerpo de Silvia fue hallado en un basural clandestino de Balsa Las Perlas con una herida de arma blanca que sería la causa de muerte.

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A pesar del femicidio de la mujer, la fiscalía neuquina decidió avanzar con la causa y es así que se detuvo a los cinco sospechosos señalados por la víctima y el sábado y lunes por la tarde se los llevó a una audiencia de formulación de cargos.

Según la información que brindó el Ministerio Público Fiscal, el hecho fue cometido el 14 de mayo de este año por la tarde, en una vivienda del barrio Confluencia donde funciona un taller mecánico y de venta de autopartes. Uno de los cinco acusados invitó a comer un asado a la víctima a ese lugar, donde se encontraban los demás varones. "Allí le dieron pastillas y bebidas alcohólicas, lo cual la colocó en una situación de vulnerabilidad y, de manera grupal, la abusaron sexualmente", detallaron.

El lugar donde fue cometido el abuso sexual fue allanado el sábado pasado, contexto en el que se produjeron las primeras detenciones. “Teniendo en cuenta el contexto del femicidio y en el marco de la colaboración de la Justicia de Neuquén con la de Río Negro, se convocó al lugar personal de Criminalística del Poder Judicial que inspeccionaron el lugar. De acuerdo a lo que me han informado, no hallaron indicios de que ese lugar sea escena de una muerte violenta”, precisó el fiscal Manuel Islas.

Añadió que el pasado 29 de agosto, y en el contexto de la investigación por el femicidio que realiza el Ministerio Público de Río Negro, se le informó a este organismo sobre la existencia de la investigación por el abuso sexual. “Hemos mantenido reuniones y comunicaciones con los fiscales del Río negro para colaborar en lo que necesiten”, sostuvo Islas.

Por el momento, sostuvieron, no hay indicios de que el femicidio y el abuso sexual estén vinculados. No obstante, la investigación será clave para determinar si es posible que alguno de los acusados por la violación haya estado involucrado en el femicidio o que al menos la violación haya sido el móvil para callar a la víctima.

Durante la audiencia, Islas acusó a los hombres por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por la pluralidad de intervinientes, algunos de ellos en carácter de autores y a otros como partícipes necesarios.