Un violento va camino a juicio por dos intentos de femicidio contra su ex pareja

Un violento acusado por un intento de femicidio contra su ex pareja cometido a inicios de este año, ahora sumó un segundo hecho idéntico ocurrido 8 años antes, por el cual la fiscalía también pretende llevarlo a juicio. Se conocieron los detalles de la grave violencia de género que marcó la relación.

La primera acusación contra el violento se efectuó en enero de este año, por un hecho cometido en el barrio Almafuerte, el 19 de enero de este año cerca de las 5 de la madrugada. Ocurrió en el contexto de una relación que mantuvieron por 19 años el imputado y la víctima, que estuvo signada por la violencia de género.

En ese entonces, regía para el agresor una orden de prohibición de acercamiento al domicilio de la mujer y de ejercer cualquier acto de perturbación hacia ella, desde el 6 de enero. Sin embargo, el hombre fue hacia la casa de ella, saltó el portón exterior y, tras romper la puerta de ingreso, se metió en la casa en la que la víctima dormía.

Al escuchar ruidos, la mujer se levantó y advirtió su presencia. El varón se tiró encima de ella, la arrinconó contra un mueble, sacó un cuchillo tipo Tramontina y le dio un puntazo en el cuello. Ante el pedido de ayuda de la víctima, vecinos y vecinas intercedieron. El imputado escapó de la vivienda y fue detenido minutos más tarde por la Policía, en la calle.

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En la audiencia realizada en la Ciudad Judicial, la fiscalía reclamó que el agresor siga detenido.

Sebastián Fariña Petersen

Luego de esto, el violento fue acusado como autor de los delitos de homicidio doblemente agravado –por el vínculo y por mediar violencia de género- en grado de tentativa; en concurso ideal con violación de domicilio y desobediencia de una orden judicial. Además, se lo puso en prisión preventiva para asegurar la integridad de la víctima.

Hubo otro intento de femicidio

Sin embargo, el avance de la investigación sobre este hecho y la relación entre víctima y victimario dio lugar a un descubrimiento más grave. El hombre ya la había intentado asesinar años antes del hecho por el que se lo imputó.

Según dio a conocer el viernes en una nueva audiencia la asistente letrada Guadalupe Inaudi, el hecho previo fue cometido el 28 de febrero de 2016, alrededor de las 7:30 de la mañana, en el domicilio de la mujer en el barrio Almafuerte.

El imputado fue hacia la casa de la víctima, a pesar de que existía una orden de diciembre de 2015 de que no podía ejercer actos de perturbación o violencia hacia ella, además de no poder ir a su domicilio ni acercarse a menos de 300 metros. Al llegar al lugar, rompió la puerta de entrada, ingresó a la casa y fue hacia la habitación en la que la mujer dormía. Se abalanzó sobre ella y le colocó un cinto en el cuello, e intentó ahorcarla.

La mujer logró escapar hacia la casa de una vecina a la que pidió ayuda, y alertó a la Policía. Luego, fue traslada hacia el Hospital Heller, donde se constató que tenía una lesión alrededor del cuello.

Este hecho, de acuerdo a lo que explicó la asistente letrada, estaba archivado ya que no se podía dar con el paradero del imputado. A instancias de la acusación que se le efectuó por el otro hecho de enero de este año, la fiscalía de Delitos contra las Personas dispuso que el caso sea desarchivado para avanzar con la imputación dentro de la misma causa.

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Los delitos que le atribuyeron por este hecho fueron homicidio doblemente agravado -por el vínculo y por mediar violencia de género- en grado de tentativa; en concurso ideal con violación de domicilio y desobediencia a la autoridad.

Sobre esta línea, Inaudi explicó que la audiencia de control de acusación por la primera imputación está prevista para principios de octubre. Por esta razón, requirió seis días de investigación para el nuevo hecho, con el objetivo de que ambos legajos sean unificados en dicha audiencia y así poder la elevación a juicio por ambos.

Asimismo, solicitó la prórroga de la prisión preventiva que cumple el agresor por un plazo de cuatro meses, con el argumento de que están vigentes los riesgos procesales por los cuales fue impuesta: para la integridad de la víctima, peligro de fuga y de entorpecimiento de la investigación.

Tras escuchar a las partes, la jueza de garantías que dirigió la audiencia, Natalia Pelosso, resolvió avalar la ampliación de la formulación de cargos, con el plazo de investigación de seis días.

Respecto al pedido para que se extienda la prisión preventiva del violento, resolvió respaldarlo y lo estableció en un lapso de cuatro meses.

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