Una banda de ladrones le robó la moto mientras se daba una ducha

Cuatro ladrones montados en dos motos forzaron un pesado portón de una casa de Cipolletti y se robaron una Honda Twister CBX 250, aprovechando que el dueño se encontraba solo y se estaba bañando.

Una cámara de seguridad de una casa vecina captó el momento en que la banda de delincuentes llegó al lugar para luego acceder al rodado que estaba estacionado en el patio interno.

Un perrito de la casa fue el único testigo presencial, pero no espantó a los intrusos a pesar de sus intensos ladridos.

El hecho se produjo el miércoles alrededor de las 19:25 en una vivienda ubicada en la calle Panamá 2.334, en el barrio Solares de La Falda de la vecina ciudad.

Gonzalo, el damnificado, relató que llegó a su casa y de inmediato ingresó al baño para darse una ducha, por lo que no alcanzó a escuchar nada que le llamara la atención.

Estima que en no más de cinco minutos después aparecieron los delincuentes, que con suma rapidez se llevaron su moto, valuada en el mercado a un monto superior a los 6 millones de pesos.

Ni bien lo advirtió se comunicó con la Policía para ponerlos en alerta. Un patrullero que llegó no mucho después salió en busca de los ladrones, pero no lograron atraparlos.

Moto robada Gonzalo La Falda .jpeg

En las imágenes captadas por la cámara vecina se puede observar que los delincuentes, que llevaban cascos y andaban en motos tipo Enduro, actuaron de forma sincronizada, con distribución de tareas.

Primero, dos de ellos se ubicaron al frente de la casa del damnificado y realizaron un reconocimiento visual. Mientras que otro de los cómplices acomoda una de las motos en que llegaron en la calle como para partir y el cuarto queda de campana en la vereda. Ahí se corta la grabación, al parecer por una falla del mecanismo del sistema. Presumen que luego levantaron el portón, lo sacaron de su riel y lo dejaron retiraron. La filmación se retoma luego cuando sale Gonzalo y se encuentra con el portón en la vereda, mientras la moto había desaparecido.

El joven realizó posteriormente la denuncia policial con el aporte del material fílmico.

Sostuvo que el sector barrial es tranquilo y no son habituales los hechos delictivos.

De allí que sospeche que no fue un golpe al voleo, sino que fueron puntualmente por la moto, la que se podía ver desde la calle. Además, cree que vigilaron sus movimientos y los horarios en que se mueve.

La seguridad con que se desempeñaron los delincuentes afirma su hipótesis.

Hasta el mediodía de este jueves no había recibido novedades de la Policía. Destacó la rapidez con que acudieron a su llamado. Supone que estaban trabajando en la zona por otro episodio delictivo o bien algún otro vecino los alertó cuando vieron merodear a los ladrones, que si bien llevaban sus rostros ocultos con cascos, algunas particularidades físicas se pueden distinguir. Lo mismo que las particularidades de las dos motos Enduro en que se movilizaban.

Las cámaras de seguridad privadas que existen en el sector barrial también podrían aportar información y es un dato que los investigadores valoran habitualmente en estos casos.