Un hombre ya había matado a una mujer para robarle $110. Ahora, intentó hacer lo mismo con su mujer. Ocurrió en la localidad entrerriana de Concordia.
Un hombre, que ya había matado a una mujer para robarle $110 y que fue beneficiado insólitamente con la prisión domiciliaria, apuñaló a su pareja. La víctima, que fue garante para que su agresor quede arrestado en su casa, quedó internada y pelea por su vida.
El violento fue identificado como Jacobo Almada, quien en julio de 2019, junto a un cómplice, asaltó a dos mujeres en la localidad entrerriana de Concordia y terminó ejecutando a una de ellas, de 44 años. Pese a la brutalidad del homicida, las evidencias y los antecedentes penales de Almada por desobediencia judicial y por balear en la pierna a un vecino, el juez Eduardo Degano resolvió que aguarde al juicio en su vivienda.
Este sábado, el asesino volvió a atacar. La policía de Concordia recibió un llamado de un vecino del barrio La Colina y al acudir al sitio, los efectivos observaron a una mujer, llamada Norma Morales y de 49 años, con un cuchillo de cocina clavado en el pecho. En su versión de los hechos, Almada dijo que minutos antes, unos hombres habían ingresado a su domicilio para agredirlos y los reconoció como familiares de su mujer. Los investigadores creen que miente y por eso, el atacante quedó detenido.
Morales, que fue llevada al hospital y continúa internada, expresó a los uniformados que fue agredida por su propia pareja. A Almada se le abriría una nueva causa por intento de femicidio.
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