Cuánto incidirá el resultado del debate entre Massa y Milei a la hora de votar

La directora de una de las consultoras más importantes de la Argentina dijo, en su última visita a Neuquén, que este año electoral dio por tierra con todos los libros de ciencia política. Se refería al comportamiento de un electorado que, como nunca, desorientó a los más avezados analistas.

Las encuestas, en su mayoría, no acertaron el resultado de las primarias como tampoco, después, lo que ocurrió el 22 de octubre.

Nadie, o casi nadie, imaginó a un Javier Milei triunfante en agosto y que luego, en lugar de sumar voluntades, terminaría perdiendo las elecciones generales.

En ese contexto, el último debate presidencial de cara al balotaje del domingo no dejó dudas de que Sergio Massa se impuso con comodidad.

El candidato a presidente de Unión por la Patria vapuleó al de la Libertad Avanza.

Al estilo de un experimentado boxeador recorrió el ring, midió a su adversario, lo cacheteó cuando quiso y hasta lo invitó a pegar para luego eludir elegantemente los golpes cual Nicolino Locche.

No hubo equivalencias pese a que Milei tenía todo para ganar, teniendo en cuenta su rol de economista frente a un ministro en ejercicio en esa área y ante un escenario complejo.

La inexperiencia en este tipo de debates, donde muchas veces se impone la oratoria y el manejo de los tiempos, le jugó una mala pasada al libertario que, además, mostró gran desconocimiento sobre temas como comercio internacional y quedó en out side en otros, donde había planteado una postura que no pudo sostener ante las insistentes preguntas de Massa. Un ejemplo de ello fue el arancelamiento a la educación pública.

Sin embargo, nadie puede asegurar que el resultado de este debate se traduzca dentro de unos días en votos. A los convencidos, de un lado y del otro, no les modificará su decisión.

¿Y al resto? Difícil saberlo.

Lo que analizaban diferentes encuestadoras, previo al debate, es que quienes en octubre se inclinaron por la izquierda mayoritariamente en el balotaje irán con Massa, que el que votó a Schiaretti se reparte en mitades iguales hacia ambos candidatos y que la definición quedará en manos del electorado de Juntos por el Cambio.

“El resultado del 19 de noviembre es una moneda al aire”, describió la mencionada responsable de una consultora citada al inicio de esta crónica.

El domingo por la noche se verá de que lado cae esa moneda.