Se cumplen cuatro años de la muerte del ex intendente Horacio "Pechi" Quiroga
Quien gobernó la ciudad de Neuquén en cuatro oportunidades, falleció el 12 de octubre de 2019. Su figura marcó un punto de inflexión en la política local.
Se cumplen este jueves 4 años de la muerte de Horacio "Pechi" Quiroga, quien fue intendente de la ciudad de Neuquén durante cuatro mandatos y que marcó un punto de inflexión en la política capitalina. Su fallecimiento generó un profundo impacto en la sociedad neuquina. Tenía 65 años.
Quiroga fue encontrado sin vida en su cama por su hija cerca de las 8.45 de la mañana del 12 de octubre de 2019. Al lugar llegaron efectivos del servicio de emergencias SIEN que a pesar de los esfuerzos no pudieron reanimarlo. El mandatario sufría desde hace tiempo una fibrosis pulmonar idiopática y estaba en la lista de espera para un doble trasplante. Una multitud le dio el último adios.
Quiroga nació el 17 de septiembre de 1954 en San Martín de los Andes. Comenzó su militancia política de muy joven en la Unión Cívica Radical y su primer cargo electivo fue como presidente de la comisión vecinal de Barrio Nuevo en 1981.
En 1987 fue elegido concejal de Neuquén, cargo que repitió en 1995. En 1999 ganó las elecciones municipales y asumió su primer mandato como intendente por la Alianza, fue reelegido en 2003, 2011 y 2015 para completar 16 años en el palacio municipal. Fue el primer representante de la UCR en alcanzar ese cargo en la historia de la ciudad.
En 2007, 2015 y 2019 se presentó como candidato a gobernador de Neuquén y en las tres oportunidades fue derrotado en las urnas por los postulantes del MPN Jorge Sapag y Omar Gutiérrez. En 2009 representó a Neuquén como diputado nacional en el Congreso, cargo que dejó en 2011.
Horacio "Pechi" Quiroga, un estudioso de la historia
Fue el primer intendente neuquino contemporáneo que puso énfasis en la breve, pero rica historia de la capital. Fue el que empezó a hablar del sueño de Carlos Bouquet Roldán, de Eduardo Talero, porque aseguraba que era necesario cumplirlo, que aquellos próceres casi olvidados de la historia neuquina habían trabajado mucho para lograrlo.
Horacio Quiroga fue un investigador de la génesis de aquel pueblito llamado Neuquén, pero más por curiosidad que por necesidad. Alguna vez, durante el aniversario número 100 de la capital, me dijo que había comenzado a interesarse por las raíces capitalinas para tratar de interpretar qué era lo que aquellos pioneros habían soñado apenas pusieron pie en este caserío en el medio del desierto. Y aseguró que lo hizo porque le daba vergüenza no saberlo.
Por aquel entonces, Pechi se había convertido en un estudioso de la historia neuquina y sostenía que el sueño de Bouquet Roldán no era sólo el de una ciudad grande, sino de una gran urbe moderna que fuera capaz de atraer gente de todos lados, no solo por su desarrollo, sino por su belleza.
Tal vez fue ese objetivo el que lo llevó a convertirse en un obsesionado del trabajo para empezar a cambiar la imagen de la ciudad, desde los detalles más chicos hasta las obras más grandes.
Comenzó a cumplir su sueño en aquellas históricas elecciones de 1999, cuando, por segunda vez, la intendencia capitalina quedó en manos de una fuerza política por fuera del MPN. Y quiso seguir los pasos que había iniciado Víctor Aníbal García, en 1958, el primer intendente constitucional que tuvo la ciudad, cuando el territorio de Neuquén se convirtió en provincia. Seguramente con aquel mismo sueño, García se puso a diseñar todas las herramientas para solucionar los graves problemas que tenía Neuquén: el de las inundaciones, las calles de tierra, el transporte y todos aquellos inconvenientes que tienen los pueblos que empiezan a crecer.
Un adiós multitudinario
Una multitud participó del recorrido del cortejo fúnebre hacia el Cementario Central de la ciudad. Una importante cantidad de personas acompañaban la procesión al grito de "Pechi" y numerosos aplausos comenzaban a marcar una emotiva jornada.
La familia del jefe comunal, entre ellas sus hijas, encabezó la caravana que tuvo una primera parada en el cenotafio de Malvinas en el Parque Central, donde los veteranos le rindieron un homenaje a Quiroga.
"Ha muerto un prócer de la modernidad", consideró el presidente del Centro de Veteranos de Neuquén, Daniel David, al brindar unas palabras de despedida al jefe comunal. El minuto de silencio junto con el arrojar de las flores puso punto final a ese momento.
Desde allí la caravana comenzó a recorrer la calle Mitre hasta la avenida Olascoaga, y tras cruzar las vías, siguieron por la avenida Argentina hasta el edificio municipal. A lo largo de las cuadras, se fue sumando más gente.
Tras el homenaje de veteranos de Malvinas, el recorrido a pie se dio por avenida Olascoaga y luego por Avenida Argentina hacia la Municipalidad. A lo largo de la caravana fue innumerable la cantidad de vecinos que se fueron sumando.
Un gran aplauso y el grito de "Pechi Pechi" recibió el cortejo fúnebre en la zona del monumento a San Martín, frente al municipio cerca de las 13.
La procesión hacia el Cementerio Central contó con la participación de disintos referentes de la arena política sin distinción de colores. Entre ellos estaban los ministros nacionales de Interior, de Defensa y de Transporte, Rogelio Frigerio, Oscar Aguad y Guillermo Dietrich respectivamente, y el gobernador Omar Gutiérrez, además de distintos miembros del gabinete provincial como municipal.
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