Voto bronca: la realidad con los números sobre la mesa

La modalidad del “voto bronca”, estudiada por los politólogos del momento, es el abstencionismo, ese fantasma que asusta con vaciar a una parte del electorado en el nuevo escenario para las PASO y presidenciales de octubre. El desencanto del segmento joven, sobre todo el que irá a las urnas por primera vez en las PASO desvela a los academicistas y encuestadores, que aún no tienen claro si el fenómeno que ocurrió en 15 de 17 provincias que eligieron gobernador será un espejo en las elecciones nacionales.

Los datos del ministerio de Interior de la Nación indican que en ocho de esas 15 provincias que bajaron la participación, votó menos del 70% del padrón. Pero las cifras que más impactan son en los distritos más grandes, donde se presumía que las ofertas electorales iban a ser atractivas. y los números se volvieron más preocupantes en dos de los distritos más importantes del país.

Las PASO en Santa Fe y las municipales en la ciudad de Córdoba, 4 de cada 10 personas no fue a votar. La participación promedio el 60%. En los últimos comicios para gobernador en Chubut, votó el 69% del padrón, pero cuatro años antes, en 2019, la participación había alcanzado el 73%. Son cuatro puntos que se suman a la impugnación del voto y el sufragio en blanco.

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Javier Milei capitaliza parte del voto bronca o desencanto. Pero en las provincias, directamente no fueron a votar

Los números más altos de participación electoral en las presidenciales ocurrieron en el regreso a la democracia. En 1983 (Alfonsín) y 1989 (Menem), estuvo por arriba del 85 %. La más baja fue en la pandemia de 2021, en las PASO legislativas. El 67,78% de las personas fue a votar, y 71,39% en las generales. Un salto de 15 puntos menos en 40 años.

María O´Donnell, periodista politóloga que participó recientemente del ciclo Más Debate de LMNeuquén dijo a este diario que el fenómeno de la abstención en las provincias, no es seguro que se traslade a la elección nacional.

Pero si sucede, parte de esos votos “indignados” podrían ir a parar a Javier Milei. Se puede dar ese escenario, o no. Hasta ahora, las encuestas han fallado, y sólo sirven como una brújula, mal calibrada.