En Comodoro Rivadavia un grupo de personas llegó con palos y fierros para desalojarlo, pero el intruso no se amedrentó. De milagro sólo hubo heridos leves.
La Policía de Chubut detuvo a un hombre que les disparó a otros tres sujetos después de usurparles la vivienda. Sucedió en la tarde del miércoles en el barrio Comipa de Comodoro Rivadavia.
Allí, un grupo integrado por unas diez personas de nacionalidad boliviana, entre las que estaba la familia que vivía en el lugar antes de que fuera usurpado, se acercaron con actitud amenazante, armadas con palos y fierros, decididas a recuperar la vivienda ubicada sobre el pasaje Los Lobos,
Desde el interior de la casa, sin embargo, lejos de acobardarse se prepararon para resistir el embate. Según lo informado en un parte policial, la disputa empezó a escalar cuando, ante la negativa de los usurpadores de retirarse, los recién llegados intentaron sacar a los ocupas por la fuerza.
En medio de la refriega y las agresiones físicas, un hombre llegó portando un arma de fuego y sin mucho más trámite, les disparó a tres hombres que exigían a los ocupantes que se fueran de la casa.
Cuando minutos después, ante un aviso, la policía llegó al lugar, constató que, increíblemente, las tres víctimas de los disparos sólo habían sufrido algunos rasguños y no tenían lesiones de gravedad.
Los vecinos les explicaron a los agentes que la agresión se dio cuando intentaban desalojar a los intrusos de la vivienda.
Un elemento que permitió confirmar preliminarmente los dichos de los testigos fue que los efectivos secuestraron en el lugar una pistola Bersa Thunder calibre 9 milímetros con diez cartuchos.
En base a lo recogido en los testimonios, detuvieron al autor de los disparos y lo trasladaron a la comisaría, acusado de lesiones leves con arma de fuego.
Rehenes en otra casa de Chubut
Horas después de los disparos en el barrio Comipa, durante la mañana de este jueves, la policía de Chubut debió intervenir en otro violento episodio en una vivienda, ahora en Rawson.
El momento de alta tensión se vivió en el barrio Covira, cuando una persona -cuya identidad no trascendió- se atrincheró en su domicilio, armada y tomando como rehenes a otros integrantes de su familia.
Según informaron fuentes de la fuerza de seguridad provincial, un llamado telefónico al número de emergencias alertó sobre la situación, advirtiendo que había una persona joven atrincherada en una casa ubicada sobre la calle Güemes.
Con un arma de fuego de fabricación casera y un cuchillo, el hombre había encerrado a sus familiares en el interior de la vivienda y los mantenía amenazados.
La Policía implementó rápidamente el protocolo dispuesto para este tipo de situaciones de crisis. Se dio intervención al equipo de negociadores y se establecieron anillos de seguridad en la zona.
Luego de una hora y media de complejas negociaciones, el secuestrador se entregó ante los agentes de la fuerza de seguridad.
A la vez, se le secuestró un cuchillo, un arma de fuego tipo “tumbera” y cartuchos de bala que se encontraban en su poder.
Más allá de los momentos de tensión vividos dentro de la casa, no se reportaron heridos. El hombre quedó detenido y se iniciaron las investigaciones pertinentes para esclarecer los motivos detrás de este acto.
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