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La Mañana huevos de pascua

¿De dónde viene la tradición de los huevos de Pascua y qué dice la Iglesia Católica?

Año tras año, para el Domingo de Pascua los fieles celebran la resurrección de Jesús. En paralelo, grandes y chicos festejan con huevos de chocolate como una forma de rememorar una tradición de antaño. De qué se trata.

Para quienes profesan la fe cristiana, la Semana Santa, en general; y la Pascua, en particular, son dos de las celebraciones más importantes del año. En coincidencia con la resurrección de Jesús, millones de personas en todo el mundo festejan regalándose huevos de chocolate. Pero, ¿cuál es el origen de esta tradición y qué tiene que ver con lo estrictamente religioso?

Este año, Semana Santa 2024 cae a finales de marzo y junto con el feriado del Día del Veterano y los Caídos en Malvinas conformará un fin de semana largo de seis días. En medio de esta oportunidad para descansar, millones de personas revivirán la tradición de los huevos de Pascua, esas delicias de chocolate que son la debilidad de grandes y chicos. Y éstos últimos esperan además la sorpresa que suelen traer junto con los confites o bombones de su interior.

¿Por qué la tradición de los huevos de Pascua?

No existe un único origen de la tradición de los huevos de Pascua, sino varias historias relacionadas con esta tradición. Tradición que a fuerza del paso del tiempo ha ido mutando hasta los ritos que repetimos año tras año.

Una de las creencias sobre el origen de los huevos de Pascua se vincula de manera directa con la resurrección de Jesucristo y algunos autores afirman que fue María Magdalena quien trasladó el primero de estos objetos simbólicos.

La autora estadounidense Amy Welborn esbozó una teoría del origen del huevo de Pascua en su libro Descodificando a María Magdalena: verdad, leyendas y mentiras (Palabra, 2006). En el texto se asegura que María Magdalena partió a evangelizar a Francia tras la crucifixión de Jesús y que durante una cena con el emperador romano Tiberio le informó que el hijo de Dios había resucitado.

Al oír ese comentario, Tiberio se dirige a María Magdalena, quien tenía un huevo sobre el regazo. “Un hombre puede volver de la muerte tan fácil como el huevo que tiene en su mano puede volverse rojo”, esbozó el emperador de Roma. Acto seguido, el huevo cobró un color rojizo intenso.

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En su libro Descodificando a María Magdalena: verdad, leyendas y mentiras (Palabra, 2006), Amy Welborn esbozó una teoría del origen de los huevos de Pascua.

En su libro Descodificando a María Magdalena: verdad, leyendas y mentiras (Palabra, 2006), Amy Welborn esbozó una teoría del origen de los huevos de Pascua.

De esa manera, algunos explican que en muchos lugares del mundo se haya comenzado a regalar huevos pintados de diferentes colores. También afirman que María Magdalena habría visto un conejo en el sepulcro vacío de Jesús. Así se conecta otra de las tradiciones en torno a la Pascua: el conejo que reparte los huevos como símbolo de la resurrección del Salvador.

Asimismo en otras culturas, el huevo guarda relación con la fertilidad, con las nuevas vidas. De ahí que los huevos se esconden y los niños salen a buscarlos justamente el Domingo de Pascua.

¿Qué significan los colores de los huevos de Pascua?

Decorar los huevos de Pascua es, posiblemente, uno de los momentos que más disfrutan miles de niños en toda Europa. Se trata de una tradición que se ha conservado a lo largo de los años y, en algunos casos, los resultados se comparan con verdaderas obras de arte.

Los colores con los que se pintan los huevos de Pascuas tienen distintos significados. El color rojo representa la sangre de Cristo y, por ende, el que se decora de esta manera tiene una importancia mayor que los demás. En Bulgaria, por ejemplo, el primer huevo que se recibe debe ser de color rojizo y éste debe conservarse hasta la próxima Pascua, ya que representa la prosperidad y el bienestar familiares.

Además del principal, los de más huevos de Pascua se pintan de otros colores como amarillo, azul, verde o violeta. También hay quienes que los decoran con otras ornamentaciones.

En la antigüedad, los huevos de Pascua se pintaban con materiales naturales, como por ejemplo las cáscaras de cebolla que les daban un tinte entre amarillo y beige o las hojas de determinadas plantas para el caso de los verdes. Todo esto ha ido quedando en desuso y dio paso a colorantes aptos para combinar con el chocolate del que están hechos en la actualidad.

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¿Qué dice la Iglesia Católica de los huevos de Pascua?

A lo largo de la historia, la Iglesia Católica adoptó diferentes posturas respecto a la tradición de los huevos de Pascua. Posturas que responden, en efecto, a las costumbres de épocas pasadas.

En primer lugar, debe destacarse que en la Biblia no hay ninguna mención a los huevos de Pascua como tales. Se trata de una tradición de origen pagano que con el transcurso de los siglos la Iglesia Católica incorporó para sí.

Durante parte de la Edad Media, el papa Julio III estableció la prohibición de consumir huevos durante la Cuaresma, es decir, el período como va desde el Miércoles de Ceniza hasta el Sábado Santo. El Domingo de Pascua, también llamado Domingo de Resurrección, se levantaba la veda y todos, en especial de los más chicos, salían a recogerlos por el campo mientras entonaban cantos de aleluya.

El Cristianismo adoptó de manera oficial esta costumbre al considerar los huevos de Pascua como símbolo de la resurrección de Jesús con el Ritual Romano , cuya primera edición se publicó en 1610 pero que contiene textos mucho más antiguos. Textos que se refieren a las bendiciones de los alimentos, como los huevos, el cordero, el pan y otros productos de la mesa de aquel tiempo.

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