Violento arranque de año en Comodoro Rivadavia: mataron a un joven y otro lucha por su vida tras ser apuñalado
En la madrugada del 1° de enero mataron a un chico de 21 años en una pelea. Además, un adolescente fue herido en el abdomen y está grave.
En Comodoro Rivadavia, que durante todo 2024 registró siete crímenes, el 2025 se inició con un temprano crimen de un chico de 21 años en una pelea, mientras que otro joven, de apenas 17, pelea por su vida en el Hospital Regional de esa ciudad de Chubut, luego de ser apuñalado por un hombre con el que, aparentemente, había pactado comprarle un cigarrillo de marihuana.
El primer caso se dio a las 6 de la mañana del 1° de enero en el barrio Laprida, y en la madrugada de este lunes fue detenido como sospechoso del asesinato un hombre de 33 años.
El acusado, identificado como R.A.R, fue señalado como presunto autor del homicidio y apresado en una vivienda cercana al lugar en el que se produjo la pelea. En el otro procedimiento de la División de Investigaciones Policiales (DIP) de Comodoro Rivadavia, según se informó, secuestraron otros elementos de interés para la investigación, según informó la fuerza de seguridad chubutense.
La pelea que terminó con la muerte del joven de 21 años, minutos después de ser trasladado en una ambulancia, se produjo sobre la calle Otawa, entre Tinogasta y Código 2046. Él y el asesino no fueron los únicos involucrados: otro muchacho que intervino en el altercado, cuyos datos personales no se informaron, también fue llevado al hospital, ya que aparentemente se encontraba bajo los efectos de sustancias tóxicas y debió ser atendido.
“Mi hijo está que se me va”
En el barrio Padre Corti de la ciudad petrolera, en tanto, otro joven de 17 años fue apuñalado y lucha por su vida. Juan de la Cruz Aguilar recibió una herida punzo cortante en una garita de colectivos situada en la calle Cerro Tres Cruces.
El autor, hasta el momento, no pudo ser identificado, pero según trascendió, se trataría de una persona que pactó previamente un encuentro con el joven, vía Telegram, para venderle un cigarrillo de marihuana.
Según el informe policial sobre el caso, el agresor le dio una puñalada en el abdomen, lo que le produjo una importante pérdida de sangre. Llegó al Hospital Regional muy grave, y por estas horas sigue en riesgo de vida.
“Mi hijo está que se me va. Está mal, lo apuñalaron y se fueron”, resumió angustiada su madre en declaraciones a El Comodorense. La mujer dijo que no tiene información sobre por qué su hijo fue hasta el lugar del ataque.
Además, contó que hace nueve años pasó por una situación similar, luego de que su hijo fue atropellado por un camión. “Pero ahora está peor”, dijo sumamente preocupada. Y agregó: “Es un buen pibe, vende pan en el supermercado chino del Kilómetro 12, muchos lo conocen”.
En estas horas, se solicitan dadores de sangre para la víctima del violento ataque, que tiene el grupo 0 Negativo, que es muy poco común, por lo cual la solidaridad de la gente se hace crucial para que no le falten las transfusiones que necesita.
Por eso, desde el banco de sangre del centro de salud lanzaron una campaña, y desde las 8 de este lunes reciben donaciones de sangre de ese grupo y factor que serán destinadas a Juan de la Cruz. Los médicos dijeron que perdió al menos cinco litros de sangre por la brutal herida que le ocasionaron.
Un año con 7 crímenes en Comodoro Rivadavia
El asesinato de Gonzalo Güenchur, otro chico de 17 años, ocurrido el 21 de mayo, fue uno de los hechos más conmocionantes del año pasado en Comodoro Rivadavia, que cerró 2024 con un total de siete homicidios.
Como en el caso de Juan de la Cruz, el chico fue apuñalado en una parada, cuando esperaba el colectivo para ir a la escuela, pero en aquella oportunidad por el robo de su celular.
Su agresor, un adolescente de apenas 15 años, fue identificado y detenido, pero quedó en libertad por ser menor de edad y reactivó el debate sobre la edad minima de imputabilidad, en una discusión en la que intervino hasta la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich.
Días después, otro crimen estremeció a la ciudad: el cuerpo de Mónica Dagotto, de 61 años, fue hallado en avanzado estado de descomposición dentro de su casa luego de que su hijo, Renzo Aconetani, de 33 años, confesó haberla asesinado. El hombre, con problemas de salud mental, convivió varias días con el el cadáver.
La investigación logró establecer que Aconetani asfixió a su madre con una almohada y le infligió heridas fatales con un cuchillo. Pasó las Fiestas detenido con prisión preventiva en el área de Salud Mental del Hospital Regional, mientras avanza la causa judicial.
En agosto fue el asesinato de Emiliano Figueroa. El conocido delincuente apodado "Carita de bebé", de 26 años, recibió tres disparos en el barrio Cayetano, cuando intentaba ingresar a una vivienda.
El principal imputado, Enrique Silva, está detenido bajo cargos de homicidio agravado, en lo que según se especula fue un ajuste de cuentas, similar al que 10 años atrás había sufrido Ezequiel Figueroa, hermano de Carita de Bebé, de apenas 17 años.
El 1° de septiembre, Isaías Jaramillo, de 23 años, fue asesinado de tres disparos en Zona de Quintas. Su agresor, Maximiliano Carriman, gritó "Vos me robaste" antes de dispararle. Aunque inicialmente se dictó prisión preventiva para Carriman, su situación se revisó en noviembre, y actualmente cumple arresto domiciliario debido a dudas sobre el testimonio clave en su contra.
Otro caso que dejó huella fue el de Gastón Acosta, de 25 años, quien murió a manos de Juan Carlos Peralta, de 55 años, durante una discusión en el barrio El Cerrito. Eran amigos y estaban compartiendo bebidas.
Según la versión del imputado, actuó en defensa propia tras ser atacado con un cuchillo por la víctima. Por eso, la calificación del caso podría cambiar a "homicidio en exceso de legítima defensa", lo que reduciría la pena esperada.
El 10 de noviembre, el asesinato de Sebastián Barría, en el barrio Radio Estación, reavivó el debate sobre la justicia por mano propia.
En este caso, vecinos cansados de los robos en el barrio advirtieron que dos sujetos habían entrado a una vivienda y decidieron intervenir. Fabián Molina, uno de ellos, se presentó horas después en la comisaría y se autoincriminó, declarando que era el autor del disparo mortal contra uno de los intrusos.
En el barrio fueron días de mucha tensión, y los vecinos incluso se manifestaron en respaldo a Molina y cuestionando la falta de seguridad y los constantes robos en la zona. Pero el fiscal del caso, Martín Cárcamo, descartó la hipótesis de "legítima defensa" y advirtió sobre los peligros de la "venganza privada", figura en la cual encuadró el caso.
Además, el arma que el supuesto autor del disparo entregó, no coincide con las pericias realizadas al cuerpo. Según testimonios, los vecinos habrían perseguido unas 8 cuadras a los ladrones y los habrían golpeado. La duda es si allí se produjo el crimen. Por ahora, Molina no fue imputado.
El último crimen del año fue conmocionante, y respondió a un caso de violencia de género. El domingo 15 de diciembre, un hombre asesinó a su ex pareja y luego se suicidó. Todo, frente a cuatro hijos de ella, dos de los cuales, adolescentes, intentaron intervenir y tuvieron que ser atendidos, porque los golpeó.
La justicia dispuso que los cuatro menores de edad quedaran al cuidado de su abuela, la madre de la víctima, en la misma casa donde presenciaron la horrenda escena. Allegados de su mamá iniciaron una colecta para ayudarlos a mudarse.
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