Robó, amenazó de muerte y está libre por ser menor
Una mujer y sus hijos sufrieron un violento asalto dentro de su casa.
"De repente para mí todo se puso negro y la basura entró", narró la mujer y detalló que el ladrón pateó la puerta insistentemente hasta que logró abrirla.
Una vez dentro de la casa, el delincuente la siguió amenazando y se puso cada vez más agresivo.
La víctima lo único que recuerda sobre ese lapso es que el ladrón se llevó una notebook que tenía sobre la mesa, con la que se encontraba trabajando, y que después se fue corriendo. "En lo único que pensaba era que mis hijos estuvieran a salvo", declaró.
Fueron sus propios vecinos los que se acercaron inmediatamente a su hogar para contenerla y, sin pensarlo, otros persiguieron al delincuente, que logró escapar a la carrera.
En diálogo con LM Neuquén, la mujer aseguró que el ladrón no tenía armas: "Si hubiera estado armado nos mata". En este sentido, argumentó: "El pendejo estaba tan drogado que seguro no sabe ni siquiera dónde estuvo".
"Me cagó la cabeza, no puedo estar sola en mi casa", reflexionó la víctima y mencionó la posibilidad de consultar a un psicólogo.
También relató que le agradeció personalmente a cada uno de sus vecinos porque, si es por el Estado, "uno está solo".
La familia actualmente evalúa mudarse a otro lugar. "Estamos muy mal, tenemos mucho miedo", reconoció la joven madre.
La denuncia ya fue radicada, aunque por tratarse de un menor de edad, el delincuente se encuentra en libertad y hasta recibió asistencia psicológica.
"Tu marido me debe plata"
Tocó a la puerta para advertir si había alguien en la vivienda y cuando vio a una mujer al otro lado de la ventana, le dijo que su marido le debía plata.
Esa fue la estrategia que utilizó el ladrón para lograr su cometido. Ante la negativa de la dueña de casa de salir a atenderlo, el joven comenzó a patear la puerta hasta que logró entrar.
"Durante unos minutos la vida de mis hijos estuvo en las manos de ese pendejo", sentenció la mujer con dolor y miedo. La tarde del viernes marcó terriblemente a la familia de Valentina Sur, que ya había sufrido otro robo anteriormente.
El delincuente aprovechó que su esposo había salido y, si bien se encontraba en las cercanías, no había llevado su celular.
El joven no paró de amenazar de muerte a ella y a sus hijos en ningún momento, y se violentó aun más cuando la mujer accionó el botón antipánico y la alarma comenzó a sonar.
Una vez que le sacó la notebook que tenía a mano, el ladrón huyó corriendo y los vecinos no lograron alcanzarlo.
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