Más allá la recordada tragedia del mendocino y la mujer uruguaya en enero, los operativos en el volcán Lanín y en otros circuitosse mantuvieron en los mismos niveles que otros años.
El boom turístico que continúa haciendo historia en la cordillera neuquina, tras el corte de viajes al exterior por parte de bancos y tarjetas de crédito y gracias a la palanca del PreViaje, no generó un incremento en los rescates de montaña.
Aunque el gran caudal de visitantes generó un incremento sustancial del tránsito y colpasó estacionamientos en ciudades, a la vera de rutas y en algunas playas, el fenómeno no derivó en un aumento del número de operativos para dar solución a accidentes o situaciones de pérdida en los circuitos de trekking y escalada.
"Fuera de la tragedia del Lanín, a diferencia de otros años no hubo tantos operativos por gente extraviada o accidentes", postuló en diálogo con LMNeuquén el director de Protección Civil de San Martín de los Andes, Sebastián Torcivia, haciendo referencia al accidente que tuvo lugar en el volcán de Junín de los Andes a principios de enero y que se llevó la vida de una mujer uruguaya y una hombre de Mendoza.
"No lo tengo bien contabilizado porque eso lo hacemos en marzo o abril, cuando finaliza la temporada; pero por lo menos en nuestra zona, creo que si salieron dos veces a buscar gente fue mucho. A diferencia de otros años que teníamos muchas salida de búsqueda y está buenísimo", celebró, antes de destacar la incidencia positiva e inesperada de la campaña para prevenir incendios.
"La hicimos en el marco de emergencia hídrica y de prevención de incendios y lo que nos trajo de bueno fue que pudimos controlar un poco más por dónde anda la gente. Con el turismo que tuvimos pensamos que nos íbamos a pasar buscando gente, pero no fue así. Creemos que, a raíz de que machacamos -tanto a los locales como a los visitantes- con no hacer fuego en lugares no autorizados o avisar antes de ir al bosque al guardaparque, no hubo gente extraviada. Por ejemplo, tuvieron que salir a buscar a un par de personas que bajando el cerro Colorado tuvieron un problema físico, Se cayeron y se torcieron un tobillo por lo que tuvieron que bajarlos, pero no extraviados", postuló.
Por su parte, Norberto Ocares, subsecretario de Defensa Civil de Junín de Los Andes, recordó el accidente del volcán Lanín que copó la atención de medios locales y nacionales y aseguró que tanto en ese área como en otras, el número de operativos no distó de otras temporadas, más allá del histórico número de turistas.
"En Lanín la situación más grave fue la que se dio a principio de enero con dos fallecidos, luego tuvimos diez evacuados, dos de ellos con camilla y varias asistencias", puntualizó al ser consultado por este medio.
Agregó que por fuera del mencionado volcán de 3.776 metros de altura, tuvieron que realizar algunas asistencias por esguinces o fracturas en medio de una travesía pero consideró que todo se dio en el marco habitual de cada temporada. "Este año gente perdida no hemos tenido", remarcó, en coincidencia con Torcivia.
Con más de diez años de experiencia en defensa civil en la región y seis a cargo de la delegación de Junín de los Andes, Ocares sostuvo que los sectores en los que más se suelen hacer operativos de rescate, más allá del volcán Lanín, son los circuitos de Paimún, el volcán Acheniyeu, Laguna verde y sectores cercanos a las termas Lahuen-Co o Epulafquen.
En tanto, desde San Martín de los Andes,Torcivia detectó cómo áreas más sensibles el cerro Colorado, senderos cercanos al lago Falkner, laguna La Kika y las laderas del cerro Curruhuinca. "Muchos se aventuran y toman otros caminos y cuando quieren retomar, se les cierra el bosque y se les hace de noche", comentó.
El peligro del Lanín en verano
"El Lanín en esta época siempre es complicado por los desprendimientos, por eso hay más cantidad de accidentes. El otro día estuve en el paso, porque estaba haciendo el mantenimiento de los equipos de monitoreo del volcán y durante las cuatro horas que estuve hubo desprendimientos de rocas, uno detrás de otro. Cuando mirás el volcán ves como cenizas suspendidas en el aire y son sedimentos de los desprendimientos que hay", postuló Ocares.
"Cuando hay nieve, si van con guía y todo el equipo es menos probable que sucedan. A la montaña hay que respetarla. La pareja que falleció tenían experiencia, pero igual el Lanín se los llevó. Hay que ser cuidadoso, muy consciente y en lo posible siempre hacerlo con guía", remarcó, para luego advertir otras tragedias en ese imponente escenario.
"Yo me perdí con las fechas pero falleció un hombre que sigue estando en el volcán porque nunca lo pudimos sacar. También se llevó puesto una acordada de Ejército", dijo en alusión a Alfredo Nabas, que quedó atrapado en una grieta 3000 metros de altura, mientras aguardaba ser rescatado, en 2018.
El otro episodio que se vino a la memoria de Ocares ocurrió en 2017. Un suboficial del Regimiento IV de Caballería de Montaña del Ejército Argentino de apellido Torres falleció a causa de un desprendimiento de rocas a 3200 metros de altura en la zona denominada La Canaleta, cuando realizaba un ascenso de instrucción junto a otros catorce militares.
"Para mi la mejor época para subirlo es en noviembre cuando todavía hay nieve. En invierno a veces se cortan los ascensos, solo quedan permitidos para los que son muy expertos. Después, mientras no haya temporales de nieve, según cómo venga el clima, se le va dando apertura. Si no nieva como este año, lo podés adelantar", agregó el subsecretario de Defensa Civil de Junín de Los Andes.
El protocolo de rescate
"En los rescates en el Lanín, por lo general, siempre trabaja la gente de Parques Nacionales que tienen una cuadrilla ahí. Son seis personas y siempre baja apoyo de más gente. A veces Ejército, Gendarmería, Defensa Civil, Bomberos", dijo Ocares, al calcular un promedio de 20 personas por operativo.
Luego de aclarar que el número de profesionales y voluntarios varía en función a la extensión de la zona del rescate y la complejidad del caso, planteó: "Como hace años que venimos trabajando juntos estamos aceitados en el tema, lo que siempre pedimos es la denuncia policial. Ya con la denuncia, voy viendo cómo es la situación y qué hace falta". "A veces con cinco personas de Parques Nacionales y otras de Defensa Civil está. Si veo que el lugar dónde hay que buscar es más grande, sumo a bomberos, al grupo especial de policía o al Ejército", precisó al dar cuenta de lo primero que tiene en cuenta al organizar los equipos de trabajo.
"También hay que pensar en llevar comida, agua y otros recursos porque la gente se va desgastando. Además hay que tener reserva para hacer relevo. Baja un grupo y sube otro. A eso siempre hay que sumarle el tema del helicóptero. Cuando está disponible el del Provincia usamos ese y si hay alguno del (Sistema provincial) de Manejo del Fuego en Chapelco -si no hay ningún incendio-, utilizamos ese y no pedimos a Neuquén", postuló.
En sintonía, el director de Protección Civil de San Martín de los Andes describió un proceso similar y, al ser consultado por el costo económico que puede ser un procedimiento, expresó: "Es muy difícil estimar y no sé cuánto está la hora de vuelo actualmente. Hay que calcular también la comida, los equipos, los vehículos y los kilómetros que hay que hacer para llegar al sector de la búsqueda. Son muchas las variantes que entran en juego". "Creo que un rescate en en Lanín requiere 100 mil pesos fácil", atinó a decir tratando de improvisar una estimación.
Balance de la temporada
A la hora de hacer un balance de la temporada, Torcivia volvió a enfatizar la importancia de la campaña para prevenir el fuego. Es que además de incidir en la merma de situaciones de extravíos, cumplió su objetivo, "más de lo esperado". "Aunque hubo un par de incendios, lo llevamos muy bien dentro de los parámetros que habíamos pensado", valoro.
"A contracara, San Martín de los Andes colapsó con el tema vehicular. Muchísimos vehículos estacionados en cualquier lugar", planteó para luego recordar el desborde en la Ruta Provincial n°48 en las inmediaciones de las paradisíacas playas de Yuco a fines de enero.
"Lo que pasó en Yuco pasó también en lago Hermoso y en el Lolog. Después de esos episodios hicimos una propuesta a Parques Nacionales para que en caso de emergencia, se pueda ingresar por la Ruta Nacional 40 y salir por el camino de una estancia que cedió un camino. En Yuco se intentó que no estacionen en ambas manos. Parques puso carteles, estuvo trabajando pero se logró a medias, porque la gente que va excede la capacidad del lugar. Es un tema a tratar para la próxima temporada", advirtió.
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