Lo que padeció Santino, mientras el niño se estaba gestando, le ocasionó varios problemas de salud, hasta el día de hoy. Su familia necesita ayuda.
Cuando estaba en la panza de su mamá, Ivan Santino Solis sufrió un accidente cerebrovascular (ACV) perinatal conocido como "stroke" que le ocasionó problemas de salud irreversibles, como la encefalopatía crónica no evolutiva, el síndrome de Lennox Gasteut -un tipo de epilepsia- y microcefalia. "Hasta el día de hoy no sabemos qué lo desencadenó", dijo su madre, Agustina Sofia Senas.
Nació de 38 semanas por cesárea, el 7 de febrero de 2015; y con el amor de su familia, hoy tiene 10 años y una sonrisa que enamora. En 2025, la pasaron muy mal a raíz de contraer un virus intrahospitalario que lo dejó en coma inducido varios días, en terapia intensiva del Hospital Castro Rendón.
Desde entonces, se alimenta a través de un botón gástrico. Antes lo hacía por una sonda.
Su papá tiene trabajos esporádicos. Una changa para ayudar en la instalación de aires acondiciones o hacer fletes. Nada fijo. En tanto, su mamá Agustina tuvo que trabajar en un local gastronómico para ocuparse plenamente de él tras la última internación que tuvo el año pasado. Por lo tanto, sin ingresos fijos ni importantes, les resulta imposible costear las terapias que necesita Santino para su estimulación.
Como consecuencia de las patologías que presenta, tampoco camina. Se moviliza en una silla de ruedas y se hace entender, pero no habla. Apenas dice algunas palabras, como "mamá" y "agua".
El nivel de gastos
En diálogo con LMNeuquén, su mamá contó que de alguna manera se las rebuscan para cubrir los remedios que toma de forma habitual, como así también los pañales que usa. "Solo la caja de lansoprazol nos sale $40.000; y Santino toma 2 al mes", ejemplificó la mujer.
Aclaró que Santino no cuenta con obra social y solo recibe una pensión por discapacidad de $280.000, más una ayuda social de Provincia que todavía no alcanza los $200.000. "Solo contamos con eso", enfatizó Agustina.
Las terapias que Santino necesita
Reiteró que para los pañales y los medicamentos "sacamos de algún lado", pero a la vez enfatizó: "Necesitamos ayuda para las terapias".
En concreto, tiene que realizar 3 terapias de kinesiologia, fonoaudiología en el área deglutoria y terapia ocupacional. Las tres están certificadas con la firma de una médica profesional y el valor total de las mismas llega a los $720.000 por mes.
"Cada terapia tiene un costo de $240.000 por mes, dos sesiones semanales de cada una", especificó Agustina.
Las personas que puedan colaborar con esta familia humilde del barrio Maronese de Neuquén puede aportar su granito de arena a dos cuentas bancarias que Agustina dejó a disposición en un flyer. Se agradece la ayuda.
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